El café de Venezuela
Cien años atrás, Venezuela ocupó uno de los lugares más relevantes en el ranking de producción y exportación de café a nivel mundial. La irrupción de la industria petrolera en el país propició, sin embargo, un rápido y progresivo declive de este cultivo que, ahora, una nueva generación de caficultores intenta recuperar.
El primer cafeto que llegó a Venezuela fue sembrado por misioneros españoles asentados en la cuenca del río Caroní, en 1730. El café lo trajeron de Brasil, donde había llegado a su vez desde la República de Surinam y de Cayena, la capital de la Guayana Francesa. Una década después de su introducción en Venezuela, y partir de 1740 el cultivo de café empezó a propagarse a la gobernación de Caracas y, poco a poco, al resto del país.
En 1776 ya se registraron cafetales en Cumaná y Río Caribe, y en 1780 el cultivo se extendió a occidente, llegando a tierras andinas, como Mérida, donde a pesar de una temprana introducción, las plantaciones no empezaron a constituirse como tales hasta después de la Guerra de Independencia (1810-1823).
En Chacao, en las cercanías de Caracas, se levantaron las primeras plantaciones cafetaleras en 1784. El pionero fue Bartolomé Blandín, fundador de la Hacienda Blandín (hoy, Hacienda la Castellana). Esta experiencia fue secundada por los presbíteros Sojo y Mohedano, en la “Hacienda San Felipe Neri”, y la “Hacienda la Floresta”, respectivamente, extendiéndose progresivamente el cultivo a muchas otras partes de Venezuela.
Fue así que el café llegó a partir de 1784 a San Antonio, Las Minas y a los valles de Aragua, pasando luego a las provincias de Carabobo y Barcelona. El cultivo de café en el estado de Táchira, por su parte, se inició en 1794 gracias a la iniciativa de Gervasio Rubio, quien lo plantó en su Hacienda la Yegüera (conocida a partir de 1855 como la Hacienda Rubio); mientras que en Trujillo, el impulsor de la caficultura fue Francisco de Labastida quien inició el cultivo de café en este territorio del oeste del país en 1801. Des de aquí y siguiendo los Andes tachirenses, el cafeto continuó su viaje hasta Colombia, penetrando en el país vecino por Cúcuta y Salvador de las Palmas.
Desde principios del siglo XIX hasta mediados del siglo XX, el cultivo de café en Venezuela desplazó al del cacao y fue el motor que dinamizó la economía nacional. Su cultivo y comercialización contribuyó a la apertura de carreteras y vías fluviales, a la consolidación, también, de centros urbanos en las zonas cafeteras y a la transformación del Puerto de Maracaibo, en principal puerta de salida de mercaderías del país.
En 1900 empezó a operar la que se convertiría en la primera empresa tostadora venezolana, Café Fama de América, fundada por el español de origen canario, Bernardo González Palenzuela. Era la época del primer gobierno de Antonio Guzmán Blanco, y a pesar de la economía inestable y las diversas dificultades que se presentaban en la Venezuela de entonces, Bernardo González empezó a comprar granos de café, a molerlos, a tostarlos manualmente y a venderlos de casa en casa. Desde entonces, su Café Fama ha formado parte de la cultura cafetera de los venezolanos.
En aquella época y hasta la mitad de la década de 1950, el café vivió muy buenos años en Venezuela, posicionando a este origen entre los cinco máximos productores del mundo. Sin embargo, el rápido desarrollo de la industria petrolera frenó la actividad cafetalera. Se produjo un trasvase de mano de obra de un sector a otro y la producción y las exportaciones cayeron de forma drástica. Venezuela no tenía suficiente café y poco más del 40% de la producción se lograba vender al exterior.
El hecho positivo fue que a pesar de la nueva situación, se hizo un esfuerzo importante para no restar calidad al café que se producía, beneficiando de forma directa al mercado interior que como habitualmente pasa en los países productores, hasta ese momento se había estado proveyendo de las calidades que resultaban menos atractivas para la exportación. A partir de entonces, el mercado doméstico pasó a disponer de cafés arábica de las variedades Típica, Bourbon, Caturra y Catuai, que los tostadores locales preparaban y vendían en latas y algunas marcas, también, en bolsas de vacío, previa desgasificación.
IMPORTANCIA SOCIAL, CULTURAL Y ECONÓMICA DEL CAFÉ EN VENEZUELA
El café sigue siendo un cultivo de importancia social y cultural en Venezuela, pero su peso económico ha dejado de ser el que era. Se estima que actualmente más de 50.000 familias viven de forma directa de su producción en el país. En la última década se ha constatado una creciente incursión de jóvenes profesionales tanto en el sector productivo como en el de la industrialización artesanal y comercialización de café. Sin embargo, la gran mayoría de los productores actuales de café, no culminó su educación básica, y por ende, son poco innovadores y reacios a los cambios de tecnologías en materia de manejo agronómico, fertilización y buenas prácticas de postcosecha.
A diferencia de otros muchos países productores, en los que el asociacionismo entre los caficultores es una práctica habitual, en Venezuela no existe esta tradición y a excepción de unos pocos casos como la Cooperativa Café Grano de Oro de Biscucuy, en el estado Portuguesa, no hay organizaciones de este tipo en el país y las que se asemejan tienen un perfil más mercantilista, y han suprimido la asistencia técnica a sus asociados o accionistas. La Cooperativa Café Grano de Oro la integran 50 pequeños productores, que producen de 0,5 a 5 toneladas de café de alta calidad al año. Cultivan cafés de las variedades Catuaí amarillo, Caturra rojo y Mundo Novo rojo.
Toda su producción es bajo sombra, y con una manejo de nutrición foliar y edáfica basada en fertilizantes líquidos y microorganismos eficientes. En su afán por recuperar la referencia del café venezolano, están trabajando para crear una marca colectiva que agrupe y comercialice las marcas artesanales a través de las que, actualmente, comercializan sus cafés. El proyecto contempla un protocolo de calidad que comience por jerarquizar las calidades según la escala y los descriptores sensoriales de SCA. El desafío es lograr primero, un posicionamiento a nivel nacional, y luego, internacional en nichos de mercado donde exista diáspora venezolana, como Perú, Chile, Argentina, Estados Unidos, Canadá y España. Mientras, en el estado de Mérida, algunos caficultores dedicados al cultivo orgánico se están intentando organizar con miras de producir cafés diferenciados y de alta calidad.
ÁREAS DE PRODUCCIÓN
El grueso más importante de la producción de café en Venezuela se localiza en los estados Lara, Portuguesa, Trujillo, Barinas, Falcón, Yaracuy, Monagas y Anzoátegui. Se trata de zonas montañosas, en las que los cafetales se ubican entre los 600 m.s.n.m y los 1600 m.s.n.m, o incluso, en algunos casos, los 1.800 m.s.n.m. Debido a la ubicación de estas explotaciones, los cafetales juegan un papel importante en el cuidado medioambiental de las zonas en las que se localizan las explotaciones cafetaleras, contribuyendo con ello al equilibrio de las cuencas hidrográficas y asegurando a la fauna de estas áreas, cobijo y comida en los árboles que dan sombra a los cafetales.
Las plantaciones son, en la mayoría de los casos, pequeñas parcelas de explotación familiar de 1 a 2 hectáreas (las explotaciones más grandes son una minoría y superan de media poco más de las 5 hectáreas). En las fincas de café venezolanas, la producción se desarrolla con el mínimo nivel de tecnologías agronómicas e insumos. Cada familia se ocupa de su café y únicamente contratan jornaleros para la cosecha que, como el resto de la producción, se realiza esencialmente sin ayuda mecánica. El rendimiento medio de café por hectárea se estima actualmente menor a 2 toneladas.
En los cafetales venezolanos crecen diversas variedades de café, todos arábicas que los caficultores procesan, mayoritariamente, por vía húmeda y natural. La primera variedad de café que se cultivó en el país fue la Típica. A ella se sumaron posteriormente, los Bourbons, Caturras y Catuaí. Hasta hace poco más de una década, esta última variedad era la dominante. Muchos caficultores se habían decidido a plantar cafetos de la variedad Catuaí por su alta productividad. Sin embargo, la incidencia de la roya está propiciado un cambio progresivo hacia variedades de cafés más resistentes, como la INIA, Colombia o Castillo, entre otras.
LA CALIDAD DEL CAFÉ VENEZOLANO
Actualmente todavía no existen en Venezuela perfiles claramente definidos para identificar de forma genérica sus cafés ni por regiones, ni por variedades, ni mucho menos por procesos postcosecha, aunque es ampliamente aceptado que el café venezolano responde a una taza suave, ligera, delicada, no muy ácida y sin características acusadas a ningún atributo. A falta de esta definición pormenorizada de perfiles, la calidad de los granos está supervisada y regulada en Venezuela.
El organismo competente en esta materia es la Corporación Venezolana del Café que de acuerdo con lo recogido en la Gaceta Oficial del país en diciembre de 2016 controla que las calificaciones comerciales de los granos se correspondan con los siguientes parámetros:
•Café Excelso Grado 1: Grano de Café Lavado de óptima calidad cultivado con prácticas agroecológicas, por encima de 800 m.s.n.m. con humedad de hasta un 10% y no más de 16 granos defectuosos por kilogramo.
·Café Gourmet Grado 2: Grano de Café de muy buena calidad cultivado con prácticas agronómicas armónicas con la naturaleza, por encima de 600 m.s.n.m. y con una humedad de hasta 12,5 % y hasta 23 granos defectuosos por kilogramo.
·Café Lavado Grado A: Grano de Café lavado y de cosecha actual, cultivado con buenas prácticas agronómicas, con humedad hasta 12,5% y hasta 30 granos defectuosos por kilogramo.
•Café Lavado Grado B: Grano corriente Lavado o Natural de cosechas pasadas o deterioro por malas prácticas postcosecha, con humedad de hasta 13% y no más de 35 granos defectuosos por kilogramo.
A fines de la calificación del café para el consumidor se establecen, además, las siguientes categorías:
•Café Gourmet o especial: Corresponde a las calificaciones para el productor de los grados 1 y 2. Para su venta bajo esta denominación debe ser certificado por la Corporación venezolana del Café, S.A.
•Café Premium: Corresponde a las mezclas de las clasificaciones para el productor de los Grados 1 y 3, y a mezclas de Grados 2 y 3.
•Café Bueno–Corriente: Corresponde a la mezcla alternativa de las clasificaciones para el productor de los Grados 3, 4 y 5, identificados como Lavado A, B y C.
CAFÉS DE ESPECIALIDAD, UNA NUEVA APUESTA PARA UN NUEVO FUTURO CAFETERO
La producción de cafés de especialidad en Venezuela apenas ha dado sus primeros pasos. Su cultivo se inició a partir del año 2010 y de momento, las fincas que han incursionado en su producción y experimentación son muy pocas. Todas ellas, representan la nueva generación de caficultores venezolanos, que ven en los cafés especiales una oportunidad de negocio. Sin embargo, el mercado nacional no responde rápidamente y lamentablemente, muchas veces, los propietarios de cafeterías, restaurantes y panaderías, prefieren “cafés baratos” para bajar sus costos en desmedro de la satisfacción del consumidor.
Aún y así, cabe destacar la apuesta de algunos negocios locales que habiendo comprobado que al servir cafés de alta calidad, logran fidelizar al consumidor e incrementar y mejorar sus ventas, están actuando como abanderados de la divulgación del café de especialidad en el país. Esta ha sido la apuesta, por ejemplo, de Cuppa Café en Maracaibo; Cinco Cafetería en Mérida; Orígenes Café en Guanare; Cafetería Grano de Oro en Biscucuy; Cafetería Apamate en Campo Elías; Cafetería OS en Chabasquén; Coffe Shop en Valencia; La Kbra Cafetería en Maracay; St. Honoré, Makao y Quiero 1 Café en Caracas; o Mahalo, il Mercato Bianco en la Isla de Margarita.
Las características del café specialty venezolano responde a parámetros bastante bien definidos y que representan bien los cafés de la Cooperativa Café Grano de Oro de Biscucuy (Portuguesa). Sus cafés lavados, por ejemplo, son reconocidos por su taza muy bien balanceada, en la que destacan fragancias a frutos rojos y aromas cítricos, a vainilla, a pino y a azúcar moscabada. Presentan, además, una excelente acidez cítrica, cuerpo sedoso y sabor residual a chocolate, muy agradable.
En el grupo de cafés naturales, los cafés de especialidad de este origen destacan por sus fragancias a frutos pasas, aromas a sandía y chocolate negro, cuerpo cremoso y sabor residual a chocolate y avellanas tostadas. Mientras que en el caso de los cafés venezolanos de especialidad sometidos a fermentación anaeróbica (macerados carbónicamente), las notas más dominantes suelen ser, fragancias a vinos de frutas, chocolate y frutas confitadas y aromas a melón, sandía y uvas. En este caso, el cuerpo de estos cafés es cremoso y su acidez láctica o tartica, presentando en boca un sabor residual a frutos secos y roble, muy característico.
PRESENTE Y FUTURO DE LA PRODUCCIÓN Y EXPORTACIÓN
Desde comienzos del siglo XXI, la producción de café en el país no ha dejado de caer y si hace poco más de 15 años atrás, Venezuela producía 160.000 toneladas, y exportaba hasta 40.000 toneladas (año 2005), la cosecha prevista para el periodo 2020-21, se estima que no superará las 60.000 toneladas, las cuales, casi en su totalidad serán consumidas en el mismo país, que ha dejado prácticamente de exportar al extranjero, salvo algunas ventas aisladas y sujetas a convenios entre países como el café vendido a Rusia, a Irán o a Turquía. Independientemente a estos acuerdos, solo son unos pocos productores de fincas de especialidad aspiran a poder exportar sus micro lotes al exterior.
CONSUMO INTERNO Y MOVIMIENTO BARISTA
Según la población actual, se puede estimar un consumo per cápita de 2,4 kg/persona/año, lo que supone un 112% de la producción nacional e implica la importación de café de terceros países.
Parte de este café llega de Colombia vía contrabando y el resto, ya de forma legal, lo hace desde Nicaragua, importado directamente por el Gobierno Nacional para suplir el déficit venezolano. En los últimos tiempos, además, ha empezado a llegar café de Brasil, ya tostado, molido y empaquetado.
También, algunos importadores de la industria alimentaria, traen al país café a punto para su comercialización de marcas italianas, estadounidenses y colombianas, especialmente en el formato de cápsulas para distribuirlas en tiendas de productos gourmet.
Culturalmente, en Venezuela se acostumbra a tomar el café con el desayuno o incluso antes. A media mañana, la mayoría de los trabajadores toman su segunda taza del día y, después de almuerzo, se acostumbra a tomar la tercera. Algunos, incluso, toman un cuarto café a media tarde, como remate a su jornada laboral. Al paladar de los venezolanos, 80%, les gustan los cafés suaves, aromáticos y dulces. Las preparaciones caseras más habituales de café son el “guayoyo” o “café claro” que se asemejaría al café americano de filtro y el café con leche sin espuma. En las cafeterías, por su parte, algunas de las bebidas más populares son el capuchino, el espresso y los frappés o cafés con hielo.
Las Escuelas de Baristas han jugado un papel importante en el reconocimiento laboral de los profesionales de la preparación y servicio del café. Actualmente la mayoría de estos centros otorgan las certificaciones SCA, como incentivo para muchos de los que deciden emigrar y también para mejorar la confianza y visibilidad de los que se quedan trabajando en el país. Algunos de estos, han creado negocios propios que van desde barras móviles para eventos, a marcas artesanales de cafés de fincas, y tiendas con cafés de diferentes orígenes, variedades y procesos postcosecha de especialidad que ellos mismos tuestan para sus clientes. Desde el año 2016, además ,Venezuela cuenta con un Campeonato Nacional de Aeropress, cuyos vencedores participan en la Competencia Mundial.
Rubén Ali Gozaine
Cooperativa Café Grano de Oro
Productor Café Azul
Nestlé invierte más de 6 millones de euros en su fábrica de café de Reus
Nestlé España tiene previsto invertir cerca de seis millones y medio de euros en su centro de producción de Reus (Tarragona), recursos que se destinarán a la instalación de una línea de producción de café que incluirá un tostador de última tecnología, una nueva máquina de llenado y avanzados sistemas de empaquetado y paletización. Las obras empezarán en breve y se prevé que finalicen a mediados de 2022. Gracias a esta inversión, la fábrica podrá aumentar su capacidad de producción en un 20%.
En la nueva línea se fabricará café tostado, en grano y molido, 100% de la variedad arábica, que se comercializará tanto en el mercado nacional como en otros países de Europa y en Asia. El interés creciente de estos países por el café tostado ha hecho que las exportaciones de la fábrica tarraconense hayan aumentado considerablemente en los últimos dos años, representando ya el 17% de su volumen de producción.
"Me siento especialmente orgulloso de la apuesta de la Compañía por nuestra planta. El hecho de que Nestlé nos haya confiado una parte importante de la fabricación del café tostado es un reconocimiento a la competitividad de nuestro centro y al expertise y la profesionalidad que demuestra día a día nuestro equipo humano", afirma Carlos Sanz Bravo, director de la fábrica de Nestlé en Reus.
Más de 40 años de historia
La fábrica de Reus fue construida en el año 1980 por los antiguos propietarios de la marca Brasilia, marca que dio nombre también a la sociedad en 1972. En el 1990, Nestlé funda Productos del Café S.A. como resultado de la fusión de tres grandes empresas cafeteras con sede en la ciudad de Reus. Desde entonces, Nestlé ha ido adquiriendo otras empresas sumando nuevas marcas a las tres iniciales. El año pasado la sociedad Productos del Café se integró en Nestlé España.
A día de hoy, se comercializan las marcas Bonka, Brasilia, Santa Cristina y La Estrella, destacando la gama Medalla de Oro para perfiles más gourmets con una alta selección de orígenes y blends.
Gremi del Cafè lanza su nueva campaña "La botiga de cafè més gran de Catalunya"
El Gremi de Cafè Torradors de Catalunya ha puesto en marcha una nueva campaña de publicidad que tiene como objetivo dar a conocer las tiendas de los distintos tostadores de Cataluña.
En la página del Gremi se puede acceder a las distintas tiendas online, categorizadas según los distintos formatos de café y cafeteras que existen en el mercado.
posa en marxa la nova campanya de publicitat amb l'objectiu de donar a conèixer les botigues dels diferents torradors que en formen part.
A la botiga del Gremi, hi ha els accessos de les botigues online, categoritzades pels diferents formats de cafè segons les diferents cafeteres que existeixen al mercat.
Promerca lanza un nuevo formato de su chocolate blanco a granel
Promerca ha lanzado al mercado un nuevo formato para su chocolate blanco a granel Chocolates Reybar. Los 820g que presenta en este nuevo formato son la cantidad justa que se requiere para preparar en chocolatera 4 litros de chocolate blanco. En el interior del envase se ha incorporado una cuchara dosificadora para poder medir los 30g necesarios para la preparación de una taza.
La lata se presenta con una tapa abre-fácil para garantizar la mejor conservación de su aroma y una tapa de plástico adicional para su cierre una vez abierto el envase.
El Chocolate Blanco Reybar es de los pocos chocolates blancos en el mercado que contienen manteca de cacao. Por este motivo, al cocerse, la manteca deja pequeñas gotas en forma de aceite que desaparecen al remover, estas gotas no se ven cuando se usan colorantes amarillos, pero en Reybar han querido obtener un chocolate lo más natural posible, por eso no incluyen en su formulación ni conservantes ni colorantes y el producto no contiene gluten.
Dentro de la política de sostenibilidad de Promerca, se ha apostado por un envase metálico al tratarse de un material 100% reciclable. Este chocolate blanco también se comercializa en estuches con 10 sobres individuales.
La Scuola Italiana Sommelier apuesta por Café Saula
La Scuola Italiana Sommelier ha llegado a un acuerdo con Café Saula para distribuir entre sus alumnos un kit en exclusiva llamado Tazzina del Cafè. Se trata de un kit donde hay la Taza Sommelier, un diseño exclusivo de Lluís Saula, que será entregada a todos los alumnos del curso de sommelier de café.
“Un kit indispensable para los profesionales, entusiastas y conocedores del oro negro”, han destacado desde esta escuela de Milán en su anuncio de Facebook, en el que incluyen el vídeo descriptivo de la Taza Sommelier de Café Saula.
No es la primera vez que el país italiano, uno de los grandes maestros cafeteros, apuesta por nuestra Taza Sommelier. La marca de cafeteras Rancilio hace tiempo que usa esta taza para hacer demostraciones de café espresso.
La Taza Sommelier con cámara de aroma, diseñada por Lluís Saula, director de Café Saula, ha sido pensada para disfrutar de forma más intensa de un café espresso. Su especial diseño ergonómico, sin asa, permite remover suavemente el café para que se desprendan los aromas menos volátiles. Y su cámara de aroma concentra y potencia todos los aromas para que se puedan apreciar más profundamente.
Cafés Candelas colabora con la XIX edición de los Premios Mestre Mateo
Cafés Candelas colabora este año por primera vez en los Premios Mestre Mateo, los galardones a la excelencia de las producciones audiovisuales de Galicia, con el fin de apoyar al sector audiovisual gallego.
Finalistas a los XIX Premios Mestre Mateo
El acto de presentación de la XIX edición de los Premios Mestre Mateo reflejó la buena salud del audiovisual gallego, como dieron cuenta las candidaturas finalistas anunciadas y el ambicioso programa de actividades que, durante un mes, promocionará el talento audiovisual gallego en eventos presenciales y online.
#ConversasCandelasMestreMateo
En cada edición de los premios la Academia organiza encuentros entre el alumnado de escuelas y facultades de audiovisual de Galicia y los profesionales de algunas categorías finalistas o ganadoras.
Gracias al apoyo de Cafés Candelas, este año la Academia da un paso más, incrementando el número de encuentros y facilitando el acceso a los mismos. Las #ConversasCandelasMestreMateo reuniarán a representantes de todas las candidaturas finalistas en encuentros en streaming, disponibles para cualquier persona intersada en conocer los diferentes perfiles profesionales que intervienen en una obra audiovsual.
Un total de 15 encuentros que podrán seguirse a través de las redes sociales de la Academia entre el 17 de marzo y el 9 de abril y que darán a conocer as peculiaridades de los diversos oficios (guión, producción, maquillaje, sonido, interpretación…) que componen el sector a través del diálogo entre sus protagonistas.
Pascual renueva por cuarto año consecutivo su certificación en Bienestar Animal
Pascual ha renovado por cuarto año consecutivo la certificación AENOR en Bienestar Animal Welfair™, homologada por IRTA (Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias) y NEIKER (Instituto Vasco de investigaciones agrarias), y basada en los referenciales europeos Welfare Quality® y AWIN ®. Es la única certificación operando actualmente en España que puede garantizar los requisitos establecidos en Welfare Quality®, el más alto estándar europeo para las evaluaciones en granja de vacuno lechero.
Pascual, que fue el primer gran fabricante en certificar en Bienestar Animal todas sus granjas, este año, además, obtiene el sello en las natas y mantequillas que fabrica en sus instalaciones. Así, todos los lácteos que produce la compañía están certificados en Bienestar Animal.
Bienestar animal, un valor de la leche. El censo de vacuno lechero español asciende a 829.019 en marzo de 2021 vacas, Pascual sigue situando en vanguardia las condiciones de vida de las más de 90.000 vacas que viven en sus 317 granjas. El pasado año recogieron casi 409 millones de litros de leche de Bienestar Animal.
En palabras de Félix Díez Fariza, responsable de Bienestar Animal de Pascual, “como compañía, tenemos la responsabilidad no solo de ofrecerle al consumidor aquello que demanda, sino de ir un paso más allá. La renovación de la certificación en Bienestar Animal es resultado del esfuerzo puesto en garantizar las mejores condiciones de vida de las vacas y de los ganaderos, con quienes trabajamos codo con codo para compartir experiencias y conocimientos, ofreciéndoles asesoramiento y los recursos necesarios para que puedan desempeñar su trabajo en las mejores condiciones posibles”.
Para Pascual el elemento diferencial de su leche frente a la competencia siempre ha sido la calidad, la naturalidad del producto. Esta calidad se consigue gracias al sumo cuidado con el que trabajan en cada fase de la cadena de valor. Tal y como explica el responsable de Bienestar Animal de la compañía, “hemos conseguido que se ponga más en valor el trabajo de los ganaderos, se les ha dado más visibilidad en el proceso de producción, y eso les ha hecho sentirse orgullosos”.
Pascual lleva más de 20 años trabajando el Bienestar Animal y desde la primera certificación en 2018 ha profesionalizado el proceso, elaborando un módulo de trabajo independiente y una guía para asesorar las granjas enfocado únicamente en el manejo e instalaciones para mejorar el bienestar animal. Además, han comenzado a aplicar tecnología Big Data para las auditorías en ganaderías. La compañía ha digitalizado el proceso en las granjas “dejando atrás el formato papel”. Esto permite consultar en tiempo real todas las auditorías de Bienestar Animal realizadas en las ganaderías, y comprobar las mejoras implantadas, así como cada uno de los puntos evaluados.
Por su parte, el director de Marketing Estratégico y de Producto de AENOR, Javier Mejía, afirma que “desde AENOR, el balance que hacemos de los cuatro años de certificación no puede ser más positivo. El propósito de AENOR para ofrecer soluciones a la sociedad basadas en los valores imperantes en cada momento está alineado plenamente con el compromiso de Pascual. Este se basa en hacer que las certificaciones y la mejora continua, sigan siendo un pilar que proporcione a los consumidores un producto más respetuoso con el bienestar animal. En estos 4 años, hemos podido ver como Pascual ha desarrollado la mejora continua en sus granjas, así como mantiene el cuidado de los animales, como ya venían haciendo desde tiempo antes de la certificación. Hemos comprobado cómo han ido implantándose las mejores prácticas ganaderas, los sistemas de trazabilidad y la comunicación con los ganaderos. El sello de AENOR contribuye a trasmitir este esfuerzo con convicción, a todos los consumidores que eligen una compra responsable.”
Además, en línea su negocio responsable desde el primer trimestre de 2020, Pascual está utilizando el Tetra Brik para leche UHT más sostenible del mercado con un 89% de materiales procedentes de fuentes renovables.Asimismo, el tapón está elaborado a base de caña de azúcar, sustituyendo el anterior de origen fósil. La compañía refuerza su apuesta por el cuidado medioambiental, al tiempo que mantiene la garantía de Bienestar Animal en todas sus granjas.
La mitad de abandono en el campo: ayudar a la continuidad del sector primario. La compañía sigue desarrollando con sus ganaderos su programa de Eficiencia Productiva que nació en 2009 y es pionero en España. Esta iniciativa tiene por objetivo principal mejorar la eficiencia en el uso de los medios de producción en las granjas, como condición necesaria para mejorar su rentabilidad, generar un menor impacto ambiental y reducir el desperdicio alimentario.
Pascual consigue así que la tasa de abandono sea inferior a la media española, colaborando con el ganadero para lograr una granja sostenible y rentable. La tasa de abandono media en España entre 2011 y 2020 fue del 6,0%, mientras que en Pascual fue del 2,8%, lo que equivale a menos de la mitad de los abandonos.
Hoy tiene 149 ganaderos dentro del programa de Eficiencia Productiva, y en 2020 produjeron 223 millones de litros de leche. Además, cuentan con más de 549 trabajadores directos y más de 13 mil hectáreas de superficie agrícola.
Una ganadería media en España produce 609* toneladas al año, mientras que una granja en el programa de Eficiencia Productiva de Pascual, 1.496, un 246% más. Si se contabiliza por vaca, un animal de dicho programa produce casi un 30% más: 11.567 kg de leche al año frente a los 8.906 kg de una vaca media de España.
Como concluye Félix Díez Fariza “unas vacas bien cuidadas van a producir más y mejor leche, con menos problemas de salud, con mayor eficiencia productiva y con un menor impacto medioambiental. Desde que nos convertimos en el primer gran fabricante con todas sus granjas certificadas bajo el más alto estándar europeo más exigente, el bienestar animal ha dejado de ser una tendencia para convertirse en una exigencia de primer nivel, cerrando el círculo de la cualificación industrial del sector”.
Iberital estrena su nueva app de mantenimiento
El impulso de la sostenibilidad empuja al sector a seguir innovando en soluciones de mantenimiento e inteligencia para adaptarse. Iberital presenta una nueva app con un nuevo sistema operativo desarrollado por el equipo técnico, una plataforma digital "All-in-One" que permite resolver incidencias en sus máquinas de forma mucho más rápida, eficaz y transparente. ¿El resultado? Una conexión total entre el equipo de Iberital fábrica y sus sistemas de servicios de asistencia técnica.
Entre las prestaciones que incluye esta nueva app, destacan:
#1
Monitorización del estado de cada incidencia en tiempo real, garantizando la trazabilidad de cada caso.
#2
Transparencia e instantaneidad en todo el proceso, desde la comunicación de la incidencia hasta la firma del parte de resolución por tu cliente.
#3
Prevención, corrección y mantenimiento de la excelencia de tus equipos Iberital.
#4
El equipo técnico tendrá el histórico de intervenciones de cada máquina antes de acceder a ella y podrá detectar patrones y corregir o reemplazar componentes.
#5
Gestión centralizada de todos los servicios, instalaciones, averías y mantenimientos en una misma app.
#6
El aliado perfecto de IBConnect. Este combo permite acceder remotamente a las máquinas, ver su estado y corregir configuraciones a través del IoT.
Más información en la web oficial de Iberital.
Cafés Baqué
Las empresas son ricas en recuerdos, vivencias, rumores, anécdotas,... que dan forma a su historia y les dotan de identidad. Cafés Baqué inició su andadura a principios del siglo pasado y en todos estos años se han ido entrelazando personas, hechos y circunstancias que dan carácter a la trayectoria de esta firma en la historia del café en España.
Juan Baqué fue el primer miembro de la familia Baqué en relacionarse con los negocios del café. Poseía una tienda de coloniales en Bilbao. Estos establecimientos con aspecto de almacén, tomaban su nombre del origen ultramarino de sus productos, que prove- nían de las colonias y despachaban tanto productos frescos a granel como envasados.
UN PATRIARCA: DON JUAN BAQUÉ
El comercio de Juan Baqué radicaba en Bilbao, en la calle Iturriza y fue durante la explotación del almacén de coloniales que obtuvo una concesión de café. Estas concesiones implicaban que el almacén recibiera una limitada cantidad de producto para revender. En el caso del café, se permitía proceder al tueste y venta posterior. Fallecido Juan Baqué (1917), Julia Delclaux y sus hijos Emilio y Francisco asumieron la gestión de los negocios familiares. En aquel tiempo, varios de ellos iban decayendo, pero en cambio el negocio del café, hasta entonces casi residual, empezó a consolidarse. En esos momentos,la empresa ya estaba en Durango donde Juan Baqué se había trasladado para instalar su negocio en plena efervescencia industrial, y prosperar.
El café, su almacenamiento, tueste, molido, empaquetado y distribución, coparon paulatinamente la sede de la calle Barrenkale 38 de esta población, y tal y como se detallará más adelante, se hicieron necesarias profundas reformas para verticalizar el proceso de producción y atender la demanda creciente de este producto. Emilio Baqué se apoyó en sus hijos para acrecentar el negocio. A pesar de no responsabilizarse directamente del negocio del café, Emilio acudía a la empresa regular y puntualmente. Su hora de entrada habitual eran las tres de la tarde, y lo primero que hacía era tomar un café negro, preguntando a todos y cada uno de los empleados si ya lo habían hecho. La cafetera estaba emplazada en el despacho de su hijo José Luis - Txetxu - y el café se tomaba siempre solo, sin leche. Su máxima al respecto era, “no se podía ni vender ni trabajar el café si a uno mismo no le gustaba”. Predicar con el ejemplo.
NUEVA MAQUINARIA
Con el objetivo de hacer del tostadero de Barrenkale en Durango una sede remodelada y capaz de asumir nuevas maquinarias, José Luis Baqué viajó a Cataluña para visitar algunas empresas. Visitó Cafés Soley, destacado tostador catalán, y allí se dio cuenta de la necesidad de verticalizar el proceso de producción de café. La remodelación de la sede de Barrenkale supuso un gigantesco salto adelante. Con capacidad multiplicada para gestionar café, tostarlo y venderlo, el problema se posicionó en cómo tener el café en verde necesario y suficiente para abastecer a aquella industria. Monopolio del Estado tras la Guerra Civil, el café quedó bajo un sistema de cupos, sumamente restringido al principio.Se hacía necesario agudizar el ingenio en la búsqueda de café en verde para el doble objetivo de satisfacer la demanda y sustituir el café de mala calidad –que era muy abundante–. Los Baqué focalizaron su atención en ello.
CAFÉS BAQUÉ S.A Y NUEVA SEDE
Fue en 1966 cuando se constituyó la empresa en sociedad mercantil anónima, cuyo objetivo era y sigue siendo la compra, torrefacción y venta de café. En sus primeros años el ritmo de crecimiento del negocio fue impresionante. Las instalaciones de Barrenkale, recientemente inauguradas, se dirigían hacia el colapso de forma inexorable. Carecían de superficie útil y su ubicación en le centro de la villa impedían cualquier posible ampliación. A todo esto, se sumaron las graves inundaciones del 13 de junio de 1975 que afectaron seriamente a la empresa. El traslado, que ya había sido decidido previamente, tendría lugar al año siguiente. En esa época el café se seguía tostando, moliendo y empaquetando de forma casi artesanal, mientras que los maestros tostadores empleaban el oído
para que el café “se quejara y les hablara”, anunciando su punto correcto de tueste.
La inauguración de la actual sede data de mayo de 1976. La ubicación del nuevo espacio en el polígono de Santa Apolonia en Iurreta, permitía afrontar el futuro con plenas garantías. En aquel entonces, la construcción de la autopista Bilbao-Behobia, dejaba a la empresa inmejorablemente comunicada.
A esas alturas, Txetxu era el que llevaba las riendas del negocio del café ya liberado del monopolioestatal. Frente a él se abría un panorama beneficioso en el que todas las empresas jugaban en igualdad de condiciones. A esto se sumaba la visión del patrocinio Txetxu, adquirida por tradición familiar y que él supo potenciar, implicando a la empresa en relevantes actividades deportivas del Duraguesado como la pelota o el ciclismo. Para Txetxu y su hermana Maribel la máxima de estos patrocinios tenían como finalidad, “Devolver a la sociedad la confianza depositada en nosotros al comprar nuestros productos”, una buena definición del marketing corporativo, pero asombrosa si se tiene en cuenta lo temprano de la visión.
GRANDES CAMBIOS Y CONSOLIDACIÓN
Las décadas de los setenta y ochenta fueron las de los grandes cambios y cuando se dieron los pasos definitivos hacia la consolidación de la empresa familiar. En aquella época, las bolsas con “la negrita”, protagonizaron la paquetería (se empleaba una envoltura con celofán en dos colores) y fue, también, cuando se lanzaron los botes de plástico y los paquetes de 50 y 100 gramos. “La negrita” fue un gran símbolo para la marca.
Con la liberalización del mercado en los 80 y la aparición de grandes marcas nacionales, todas ellas en manos de multinacionales, llegó el momento de ampliar y cimentar los procesos de producción. José Luis Baqué impulsó la creación del CMP y UTE, en las que Baqué acabó ejerciendo un fuerte liderazgo. En esta época el equipo de comerciales de la firma merece mención especial, pues Cafés Baqué creció en gran medida por la calidad y dedicación del departamento de ventas.
Volcados en el estratégico nicho de hostelería alcanzaron hitos memorables en la venta de café. Eran tiempos en los que las promociones se realizaban mediante degustación en punto de venta. La oferta se componía de Guinea (Robusta), Superior (Arábicas) y torrefacto. En paralelo se fue generando y consolidando un importante mercado en los economatos de empresa.
Se acuñaron lemas publicitarios. Uno de ellos, “El Café es como un beso, agradable de tomar y difícil de olvidar” provocó las iras del párroco de Durango, José María Echeandia, quien lo consideró indecente. Lograron convencerle de la inocencia y castidad de la frase. También comenzaron las promociones con regalos para incrementar ventas en alimentación.
Era momento de adoptar decisiones estratégicas que implicaran ganar cuota de mercado. En hostelería, consistió en distribuir el café puerta a puerta. Este sistema de autoventas fue un éxito que los rivales trataron de imitar.
LOS AÑOS 90 HASTA LA ACTUALIDAD
El 24 de julio de 1998 Maribel Baqué adquiere el 100% del capital de la compañía. Una mujer que había heredado de su madre una fuerte dosis de tenacidad y talante. Fueron muchos los cambios que llevó a cabo que hicieron que Cafés Baqué sea a día de hoy lo que es. Desde las instala- ciones, el proceso productivo y maquinaria, hasta toda la estrategia de marketing, aspecto que tuvo claro desde un principio. Creía en una nueva imagen de marca para impulsar la dimensión global de la empresa. Fue el inicio de una dinámica de cambios en la estrategia de comunicación que supusieron una renovación completa, sin perder el compromiso y la visión del patrocinio como devolución a la sociedad de parte de la riqueza que esta daba a la empresa.
Su muerte sobrevino en 2002, tras una cruel enfermedad, pasando la empresa a sus hijas María y Esther. De la mano de ellas se sigue apostando por una fuerte expansión reforzando la planta de molido, la ampliación de los almacenes, la compra de maquinaria tecnológicamente avanzada, el refuerzo de la Escuela de Café y sin olvidar la compra en 2005 de la empresa riojana Cafés Greiba, permitiendo consolidar la cuota de mercado en esta comunidad en torno al 50%.
En la actualidad, y fruto de toda esta historia, se cuenta con una fuerte implantación tanto en el canal de Horeca como en el canal de Retail. Además de ser fabricantes de reconocidas marcas de la distribución dispone de una amplia gama de productos diferenciados en todas las categorías del café en el que destacan entre otros las cápsulas compostables compatibles con Nespresso. Una gama que nace de la decisión estratégica de la compañía en 2019 de alinearse con la sostenibilidad y la economía circular en todos sus ámbitos.
El cinturón de cartón de los vasos de papel
JAY SORENSEN, INVENTOR DE JAVA JACKET
Pocos inventos tan simples como el cinturón que reviste los vasos de café para evitar quemaduras han aportado tantos beneficios y alegrías a su desarrollador.
Jay Sorensen es el avispado emprendedor que hace tres décadas presentó al mundo esta tira de cartón que lejos de resultar simple, ha sido toda una revolución en el café para llevar y a él, su inventor, lo ha convertido en millonario. El nombre oficial de tan popular cinturón es Java Jacket y su origen, como muchos otros grandes inventos se debe, un poco, a la casualidad. Cuando esto ocurrió, una de las ocupaciones principales de Jay Sorensen era llevar a su hija al colegio antes de entrar a trabajar. Tras dejarla allí, la rutina de su día continuaba en el drive-through de un restaurante cercano donde solía pedir un café americano para llevar.
El día que se le ocurrió crear el Java Jacket, Sorensen protagonizó allí un fatal incidente, el cual, lejos de haberse convertido en una simple anécdota se convirtió en el desencadenante de uno de los inventos más millonarios de la historia del café. Sorensen se derramó todo el café por sus muslos cuando tras cogerlo de la bandeja lo soltó instintivamente al no poder soportar en la mano la temperatura del café que le habían servido. Hastiado por lo que le había sucedido empezó a dar vueltas a posibles soluciones al problema, obviando todas aquellas que comportaran arreglos tan poco sostenibles como el uso dos o incluso tres vasos de cartón, uno dentro de otro, para frenar la transferencia del calor de la bebida a nuestras manos.
Sorensen diseñó varios vasos de café con funda incorporada, pero se percató que no era una idea rentable para las cafeterías. Llevó a cabo toda clase de pruebas, pero ninguna se adaptaba a lo que él estaba buscando. Fue entonces que decidió cambiar su enfoque y simplificar aún más lo que estaba haciendo. Pensó en una funda independiente de cartón, que revistiera el vaso y que los establecimientos pudieran utilizar según sus necesidades.
Sorensen diseñó un prototipo inspirado en la absorción de las toallas de papel y en el cartón que se emplea en las tintorerías para poner en los cuellos de las camisas y estuvo testando su invento durante dos años, de 1991 a 1993. Al darse cuenta de que a cada persona que le proporcionaba uno de sus cinturones de vaso lo agradecía, decidió patentar y comercializar su invento. Tras su participación en el “Coffee Fest” de Seattle, la confirmación de que su ingenio era un buen invento lo animó a poner en marcha de forma definitiva su empresa. Necesitaba una inversión de 20.000 dólares y un equipo de cuatro personas para hacerlo y lo consiguió. Así nacía Java Jacket. El primer año, Sorensen vendió 250 millones de sus cinturones para vasos de café y facturó 8 millones de dólares con su invento. En poco tiempo logró cerrar acuerdos con casi todos los restaurantes y cafeterías de Portland, donde vivía, y su Java Jacket se hizo tan popular que pronto empezó a cerrar acuerdos con empresas de todo el país y también de fuera de él. Con quien no lo consiguió fue con Starbucks, que rompió las negociaciones con Sorensen tras meses de conversaciones. Starbucks, entonces, lanzó su propio cinturón de cartón, a lo que Sorensen respondió con una demanda que nunca ganó porque la cadena internacional de café había añadido algunas modificaciones al Java Jacket que lo convertían en un producto diferente.
A pesar de este contratiempo y de lo que podría haber supuesto para Sorensen entrar en el negocio de Starbucks, el éxito del Java Jacket ha logrado ser universal y a fecha de hoy la firma vende más de 25 millones de unidades de Java Jacket al mes. Actualmente existen en el mercado múltiples versiones del invento de Sorensen, aunque desde su compañía siguen fundamentando el éxito y genialidad de sus cinturones de cartón en su diseño patentado de cartón con protuberancias en relieve que permiten que el aire pase entre la banda y el vaso. Esto, explican, brinda a su cinturón una protección adicional al proporcionar un mejor aislamiento.
Y por si la fama de su invento y la recompensa económica conseguido por él fueran poco, el ingenio de Sorensen se ha convertido, además, en una pieza permanente del MoMa de Nueva York, donde es expuesto como una de las “Obras Maestras humildes de la humanidad” y producto necesario y sensible con los problemas de la gente.