El café de especialidad en Europa
La demanda de cafés especiales coincide con un creciente interés por los productos producidos de forma ética y sostenible y la curiosidad de los consumidores sobre la historia de su café. Esto está favoreciendo a una progresiva visibilidad de los caficultores, pues en la venta y servicio de estos cafés se ha vuelto esencial contar la historia que hay detrás de cada taza, su origen y los demás aspectos ambientales y sociales que lo rodean.
¿POR QUÉ EUROPA ES UN MERCADO INTERESANTE PARA EL CAFÉ DE ESPECIALIDAD?
Aunque no se dispone de datos específicos a nivel europeo sobre el consumo de café especial, ni a nivel doméstico ni fuera del hogar, básicamente porque no existe un consenso de la industria sobre una definición clara de los cafés que debería englobar esta categoría, lo cierto es que el continente alberga un número cada vez mayor de establecimientos de café y micro tostadores, y un número cada vez mayor, también, de consumidores que aprecian y prefieren las excelentes cualidades organolépticas de estos cafés diferenciados por los que están dispuestos a pagar más.
Es así, que esta nueva demanda de cafés de especialidad ha traído consigo nuevas formas de actuar en el café europeo del café, desde la misma obtención del producto a la oferta en carta de esos cafés. Algunas cafeterías, por ejemplo, después de volverse lo suficientemente grandes, comienzan a obtener sus granos verdes directamente de origen, apoyándose, a menudo, en su antiguo proveedor, generalmente un importador, para obtener apoyo financiero, control de calidad y logística. Mientras estos mismos establecimientos y también otros, presentan a sus clientes cartas de cafés nunca antes vistas, con orígenes y preparaciones que llaman la atención del consumidor.
En 2019, las cafeterías de marca líderes en continente fueron Costa Coffee, Starbucks y McCafé, con cuotas de mercado del 8,4%, 7,4% y 6,8% respectivamente. Si bien estas empresas a gran escala no siempre ofrecen productos de café de especialidad, establecen una tendencia de consumo hacia las cafeterías y otras compras fuera de casa. Esta tendencia de consumo se extiende a las cafeterías más pequeñas y especializadas que ofrecen cafés especiales de alta calidad y favorecen, también, el propio crecimiento del mercado de cafeterías de marca europea, que el pasado año creció un 3,4%, hasta alcanzar un total de cerca de 38.000 mil puntos de venta en todo el territorio. Todo ello hace de Europa, pues, un mercado interesante para el café de especialidad.
ANTES, DURANTE Y DESPUÉS DE LA COVID-19
Antes de la crisis de COVID-19, se estimaba que el mercado europeo de cafeterías continuaría creciendo a una tasa media anual del 3,9% entre 2020 y 2025. Sin embargo, este segmento se ha visto muy afectado por los efectos de la crisis sanitaria que ha obligado a cierres temporales y medidas de distanciamiento social. Ello ha provocado una fuerte reducción del consumo fuera del hogar, lo que ha afectado especialmente a las cafeterías y (micro) tostadores que abastecen al segmento de servicios de alimentación.
Por ejemplo, en Alemania, el consumo de café en cafeterías y restaurantes disminuyó alrededor del 76% durante los meses de marzo y abril de 2020, mientras que en España, en ese mismo periodo, el estado de alarma decretado para hacer frente a la pandemia se tradujo en el cierre de establecimientos y una reducción de las ventas de todo tipo de productos en el sector de la hostelería, incluido el café, superior a los 4.300 millones de euros.
Casi el 50% de esa cantidad correspondió al segmento de los restaurantes de servicio completo y el 30%, al de los bares y las cafeterías, que ha sido el segundo segmento más golpeado. Estas circunstancias han acelerado la tendencia hacia la compra online para el consumo doméstico. Los tostadores han comenzado a vender a través de sus propias tiendas web o mediante plataformas y en general, se ha demostrado que los micro tostadores y las cafeterías independientes tienden a mostrar un nivel más alto de innovación, poder de marketing y lealtad de los consumidores para combatir la crisis.
¿El futuro?...Dadas las circunstancias actuales, es difícil ofrecer perspectivas de crecimiento para los diferentes mercados. No obstante, en general, se espera que el interés por los cafés de alta calidad en los diferentes mercados europeos sea a largo plazo, superando así la crisis. Por lo tanto, es muy probable que la demanda de cafés especiales aumente nuevamente después de que se levanten las estrictas medidas relacionadas con la COVID-19. Sin embargo, la demanda de cafés especiales en este 2020 será definitivamente más baja de lo habitual.
MERCADOS NACIONALES DE ESPECIALIDAD
Ahora bien, al margen de este 2020, todos los mercados europeos habían mostrado hasta ahora, una demanda creciente de cafés especiales, destacando el tamaño más pronunciado del segmento representado por los países del noroeste de Europa. Esta zona está marcada por mayores niveles de ingresos y conciencia de los consumidores, así como por una cultura cafetera más desarrollada que el del resto del continente. A rasgos generales, el interés de los europeos en otras culturas, derivado, en parte, por la mayor facilidad de viajar, la globalización, la conexión virtual,...ha favorecido una mayor curiosidad de los consumidores por los orígenes del café. La responsabilidad social y las preocupaciones políticas conectan a los consumidores con el bienestar de los productores, mientras que un mayor interés en temas ambientales, desde el reciclaje hasta el calentamiento global, estimulan su interés en el cultivo de café sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
El análisis por países señala, un año más, a los cafés de alta calidad como foco principal del mercado escandinavo. Países como Suecia, Dinamarca y Noruega, considerados actores importantes de este mercado a nivel regional e internacional (Noruega fue el país fundador de la Asociación de Cafés Especiales en Europa) registran las tasas de crecimiento más altas en las ventas minoristas de cafeterías desde 2010 y como resultado, el número de cadenas de café y micro tostadores en estos territorios no para de crecer.
En Suecia, en circunstancias no COVID-19, se abren alrededor de 10 nuevas pequeñas empresas tostadoras cada año. Mientras que Dinamarca lidera la mayor tasa de crecimiento de nuevas cafeterías con un crecimiento récord de tiendas del 14,5%, en 2018.
Ejemplos de cafeterías especializadas en Escandinavia incluyen Kafferäven y Drop Coffee Roasters (Suecia), Coffee Collective y Sonny (Dinamarca) o Lippe y Fuglen (Noruega). Estos tostadores atienden a clientes interesados por el café y siguen los principios de comercio directo, transparencia y productos de alto valor.
Un caso que llama la atención en Europa con respecto al café de especialidad, son las buenas expectativas para este producto en Francia. Y es que aunque este mercado tardó mucho en despegar, en 2019, la cuota estimada para estos cafés en Francia alcanzó del 2% al 3% de su mercado total de café, crece rápidamente, tanto, que se espera que la participación de los cafés especiales en el mercado francés aumente a aproximadamente al 10% en 2025.
En Reino Unido, la expansión de cadenas de cafés especiales como Grind, GAIL’s y Joe & The Juice, y la participación de cadenas establecidas, como Starbucks, Costa Coffee y Caffè Nero, están dando alas a la demanda de cafés especiales en el país. El Reino Unido es el mercado de cafeterías más grande de Europa en la actualidad, y ha crecido de forma continua en los últimos veinte años. En 2019, el Reino Unido contaba con un total de 25.892 cafeterías, de las cuales 1.400 se clasificaron como cafeterías de especialidad. Ejemplos de estas tiendas incluyen Small Batch Coffee Roasters, Union Brew Lab, Caravan Coffee Roasters, Wood Street Coffee o Redemption Roasters.
Otro país donde crece el mercado de café de especialidad es Alemania, y lo hace, también de mano del crecimiento del consumo fuera del hogar, que en el 2019 aumentó un 5% más respecto al año anterior. En ese año, 2018, alrededor del 12% del consumo anual total de café de Alemania se produjo en la hostelería y la restauración, siendo este país, el segundo en número de cafeterías de toda Europa.
La República Checa, Hungría, Polonia y Rumania, por su parte, son los mercados del este, donde el interés por el café de especialidad crece de forma más destacada. En Rumania, por ejemplo, el número de cafeterías de especialidad aumentó de solo 3 a más de 90 cafeterías entre 2013 y 2019. El número de cafeterías en Hungría también ha crecido exponencialmente en los últimos años, alcanzando aproximadamente 150 cafeterías de especialidad en 2019.
Es destacable, además, como a medida que el nicho de mercado de especialidades comienza a florecer en esta región, se afianzan, también, gran cantidad de festivales del café organizados por operadores locales y organizaciones de ámbito internacional, lo que da cuenta del interés y potencial de estos mercados para el café de especialidad.
TENDENCIAS Y OPORTUNIDADES
Además de la creciente variedad de actores activos en el mercado de cafés especiales, los principales también están cada vez más involucrados. Esto ha favorecido el afianzamiento de nuevas tendencias y oportunidades para el café de especialidad en Europa, como la progresiva introducción de cápsulas de café especial en el mercado de monodosis, que se ha convertido en un segmento en crecimiento por sí solo. De hecho, el uso de estos cafés en cápsulas brinda interesantes oportunidades en el proceso de popularización de cafés especiales de diferentes orígenes y sabores, y la industria lo está aprovechando.
Los compradores también están desarrollando lentamente el interés en los cafés robustas finos y desde el sector se están realizando todo tipo de esfuerzos para mejorar la producción y alcanzar la calidad “Fine Robusta”. En Ghana, por ejemplo, el gobierno y las marcas de café han comenzado a explorar métodos de producción para producir específicamente este tipo de calidad de cafés, mientras que algunas cafeterías y tostadores europeos han hecho lo propio, convirtiendo a los cafés robustas finos en oferta destacada de sus negocios. Lo ha hecho, por ejemplo, el micro-tostador suizo Röstlabor que ofrece robustas de origen único de países como México y Tailandia, junto con Arábicas especiales.
Otro ejemplo es el del tostador con cadena de cafeterías, Black Sheep Coffee del Reino Unido, que sirve Robusta de especialidad de la primera finca dedicada en exclusiva a este tipo de café: Kaapi Royale Coffee, en Sethuraman Estate, India.
Europa es un gran mercado para el café y el café de especialidad tiene aquí una excelente oportunidad para triunfar. Establecer relaciones a largo plazo basadas en la calidad es la clave.
Fuente
Estudio realizado por CBI (Centre for the Promotion of Imports from developing countries) en colaboración con ProFound-Advisers In Development
*Puedes acceder a la revista Fórum Café nº83 completa aquí.
El café de especialiad en las cafeterías europeas
La demanda de cafés especiales coincide con un creciente interés por los productos producidos de forma ética y sostenible y la curiosidad de los consumidores sobre la historia de su café. Esto está favoreciendo a una progresiva visibilidad de los caficultores, pues en la venta y servicio de estos cafés se ha vuelto esencial contar la historia que hay detrás de cada taza, su origen y los demás aspectos ambientales y sociales que lo rodean.
¿POR QUÉ EUROPA ES UN MERCADO INTERESANTE PARA EL CAFÉ DE ESPECIALIDAD?
Aunque no se dispone de datos específicos a nivel europeo sobre el consumo de café especial, ni a nivel doméstico ni fuera del hogar, básicamente porque no existe un consenso de la industria sobre una definición clara de los cafés que debería englobar esta categoría, lo cierto es que el continente alberga un número cada vez mayor de establecimientos de café y micro tostadores, y un número cada vez mayor, también, de consumidores que aprecian y prefieren las excelentes cualidades organolépticas de estos cafés diferenciados por los que están dispuestos a pagar más.
Es así, que esta nueva demanda de cafés de especialidad ha traído consigo nuevas formas de actuar en el café europeo del café, desde la misma obtención del producto a la oferta en carta de esos cafés. Algunas cafeterías, por ejemplo, después de volverse lo suficientemente grandes, comienzan a obtener sus granos verdes directamente de origen, apoyándose, a menudo, en su antiguo proveedor, generalmente un importador, para obtener apoyo financiero, control de calidad y logística. Mientras estos mismos establecimientos y también otros, presentan a sus clientes cartas de cafés nunca antes vistas, con orígenes y preparaciones que llaman la atención del consumidor.
En 2019, las cafeterías de marca líderes en continente fueron Costa Coffee, Starbucks y McCafé, con cuotas de mercado del 8,4%, 7,4% y 6,8% respectivamente. Si bien estas empresas a gran escala no siempre ofrecen productos de café de especialidad, establecen una tendencia de consumo hacia las cafeterías y otras compras fuera de casa. Esta tendencia de consumo se extiende a las cafeterías más pequeñas y especializadas que ofrecen cafés especiales de alta calidad y favorecen, también, el propio crecimiento del mercado de cafeterías de marca europea, que el pasado año creció un 3,4%, hasta alcanzar un total de cerca de 38.000 mil puntos de venta en todo el territorio. Todo ello hace de Europa, pues, un mercado interesante para el café de especialidad.
ANTES, DURANTE Y DESPUÉS DE LA COVID-19
Antes de la crisis de COVID-19, se estimaba que el mercado europeo de cafeterías continuaría creciendo a una tasa media anual del 3,9% entre 2020 y 2025. Sin embargo, este segmento se ha visto muy afectado por los efectos de la crisis sanitaria que ha obligado a cierres temporales y medidas de distanciamiento social. Ello ha provocado una fuerte reducción del consumo fuera del hogar, lo que ha afectado especialmente a las cafeterías y (micro) tostadores que abastecen al segmento de servicios de alimentación.
Por ejemplo, en Alemania, el consumo de café en cafeterías y restaurantes disminuyó alrededor del 76% durante los meses de marzo y abril de 2020, mientras que en España, en ese mismo periodo, el estado de alarma decretado para hacer frente a la pandemia se tradujo en el cierre de establecimientos y una reducción de las ventas de todo tipo de productos en el sector de la hostelería, incluido el café, superior a los 4.300 millones de euros.
Casi el 50% de esa cantidad correspondió al segmento de los restaurantes de servicio completo y el 30%, al de los bares y las cafeterías, que ha sido el segundo segmento más golpeado. Estas circunstancias han acelerado la tendencia hacia la compra online para el consumo doméstico. Los tostadores han comenzado a vender a través de sus propias tiendas web o mediante plataformas y en general, se ha demostrado que los micro tostadores y las cafeterías independientes tienden a mostrar un nivel más alto de innovación, poder de marketing y lealtad de los consumidores para combatir la crisis.
¿El futuro?...Dadas las circunstancias actuales, es difícil ofrecer perspectivas de crecimiento para los diferentes mercados. No obstante, en general, se espera que el interés por los cafés de alta calidad en los diferentes mercados europeos sea a largo plazo, superando así la crisis. Por lo tanto, es muy probable que la demanda de cafés especiales aumente nuevamente después de que se levanten las estrictas medidas relacionadas con la COVID-19. Sin embargo, la demanda de cafés especiales en este 2020 será definitivamente más baja de lo habitual.
MERCADOS NACIONALES DE ESPECIALIDAD
Ahora bien, al margen de este 2020, todos los mercados europeos habían mostrado hasta ahora, una demanda creciente de cafés especiales, destacando el tamaño más pronunciado del segmento representado por los países del noroeste de Europa. Esta zona está marcada por mayores niveles de ingresos y conciencia de los consumidores, así como por una cultura cafetera más desarrollada que el del resto del continente. A rasgos generales, el interés de los europeos en otras culturas, derivado, en parte, por la mayor facilidad de viajar, la globalización, la conexión virtual,...ha favorecido una mayor curiosidad de los consumidores por los orígenes del café.
La responsabilidad social y las preocupaciones políticas conectan a los consumidores con el bienestar de los productores, mientras que un mayor interés en temas ambientales, desde el reciclaje hasta el calentamiento global, estimulan su interés en el cultivo de café sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
El análisis por países señala, un año más, a los cafés de alta calidad como foco principal del mercado escandinavo. Países como Suecia, Dinamarca y Noruega, considerados actores importantes de este mercado a nivel regional e internacional (Noruega fue el país fundador de la Asociación de Cafés Especiales en Europa) registran las tasas de crecimiento más altas en las ventas minoristas de cafeterías desde 2010 y como resultado, el número de cadenas de café y micro tostadores en estos territorios no para de crecer. En Suecia, en circunstancias no COVID-19, se abren alrededor de 10 nuevas pequeñas empresas tostadoras cada año. Mientras que Dinamarca lidera la mayor tasa de crecimiento de nuevas cafeterías con un crecimiento récord de tiendas del 14,5%, en 2018.
Ejemplos de cafeterías especializadas en Escandinavia incluyen Kafferäven y Drop Coffee Roasters (Suecia), Coffee Collective y Sonny (Dinamarca) o Lippe y Fuglen (Noruega). Estos tostadores atienden a clientes interesados por el café y siguen los principios de comercio directo, transparencia y productos de alto valor.
Un caso que llama la atención en Europa con respecto al café de especialidad, son las buenas expectativas para este producto en Francia. Y es que aunque este mercado tardó mucho en despegar, en 2019, la cuota estimada para estos cafés en Francia alcanzó del 2% al 3% de su mercado total de café, crece rápidamente, tanto, que se espera que la participación de los cafés especiales en el mercado francés aumente a aproximadamente al 10% en 2025.
En Reino Unido, la expansión de cadenas de cafés especiales como Grind, GAIL’s y Joe & The Juice, y la participación de cadenas establecidas, como Starbucks, Costa Coffee y Caffè Nero, están dando alas a la demanda de cafés especiales en el país. El Reino Unido es el mercado de cafeterías más grande de Europa en la actualidad, y ha crecido de forma continua en los últimos veinte años. En 2019, el Reino Unido contaba con un total de 25.892 cafeterías, de las cuales 1.400 se clasificaron como cafeterías de especialidad. Ejemplos de estas tiendas incluyen Small Batch Coffee Roasters, Union Brew Lab, Caravan Coffee Roasters, Wood Street Coffee o Redemption Roasters.
Otro país donde crece el mercado de café de especialidad es Alemania, y lo hace, también de mano del crecimiento del consumo fuera del hogar, que en el 2019 aumentó un 5% más respecto al año anterior. En ese año, 2018, alrededor del 12% del consumo anual total de café de Alemania se produjo en la hostelería y la restauración, siendo este país, el segundo en número de cafeterías de toda Europa.
La República Checa, Hungría, Polonia y Rumania, por su parte, son los mercados del este, donde el interés por el café de especialidad crece de forma más destacada. En Rumania, por ejemplo, el número de cafeterías de especialidad aumentó de solo 3 a más de 90 cafeterías entre 2013 y 2019. El número de cafeterías en Hungría también ha crecido exponencialmente en los últimos años, alcanzando aproximadamente 150 cafeterías de especialidad en 2019.
Es destacable, además, como a medida que el nicho de mercado de especialidades comienza a florecer en esta región, se afianzan, también, gran cantidad de festivales del café organizados por operadores locales y organizaciones de ámbito internacional, lo que da cuenta del interés y potencial de estos mercados para el café de especialidad.
TENDENCIAS Y OPORTUNIDADES
Además de la creciente variedad de actores activos en el mercado de cafés especiales, los principales también están cada vez más involucrados. Esto ha favorecido el afianzamiento de nuevas tendencias y oportunidades para el café de especialidad en Europa, como la progresiva introducción de cápsulas de café especial en el mercado de monodosis, que se ha convertido en un segmento en crecimiento por sí solo. De hecho, el uso de estos cafés en cápsulas brinda interesantes oportunidades en el proceso de popularización de cafés especiales de diferentes orígenes y sabores, y la industria lo está aprovechando.
Los compradores también están desarrollando lentamente el interés en los cafés robustas finos y desde el sector se están realizando todo tipo de esfuerzos para mejorar la producción y alcanzar la calidad “Fine Robusta”. En Ghana, por ejemplo, el gobierno y las marcas de café han comenzado a explorar métodos de producción para producir específicamente este tipo de calidad de cafés, mientras que algunas cafeterías y tostadores europeos han hecho lo propio, convirtiendo a los cafés robustas finos en oferta destacada de sus negocios.
Lo ha hecho, por ejemplo, el micro-tostador suizo Röstlabor que ofrece robustas de origen único de países como México y Tailandia, junto con Arábicas especiales. Otro ejemplo es el del tostador con cadena de cafeterías, Black Sheep Coffee del Reino Unido, que sirve Robusta de especialidad de la primera finca dedicada en exclusiva a este tipo de café: Kaapi Royale Coffee, en Sethuraman Estate, India.
Europa es un gran mercado para el café y el café de especialidad tiene aquí una excelente oportunidad para triunfar. Establecer relaciones a largo plazo basadas en la calidad es la clave.
Fuente
Estudio realizado por CBI (Centre for the Promotion of Imports from developing countries) en colaboración con ProFound-Advisers In Development
*Puedes acceder a la revista Fórum Café nº84 completa aquí.
La biodiversidad como herramienta de futuro para el café sostenible
El año pasado, su café batió el récord absoluto de precio en la historia de Colombia, y su proyecto se expande como una mancha de aceite. Su objetivo, ahora, es impulsar la transformación productiva de 50.000 pequeñas fincas cafeteras de este país, en un plazo de 7 a 10 años. La prueba piloto cuenta ya con la participación de cientos de familias cafetaleras colombianas y panameñas.
La salud del suelo es una de las principales variables para definir el concepto de sostenibilidad en los modelos de agricultura actual y por ello la transparencia en este tema dada su relación con la preservación de la biodiversidad y el cambio climático, marca, y marcará, la diferencia entre lo aparentemente sostenible y lo verdaderamente sostenible.
“La caficultura sostenible es una sinfonía de esfuerzos colectivos para hacer de esta producción, una actividad económica de valor compartido y alianzas de impacto a todos los niveles, incluidos el social, ambiental y económico”, explica Felipe Sardi, fundador de Biodiversal, un proyecto que apuesta por convertir la producción cafetera a un modelo de agricultura regenerativa que permita a los caficultores elevar la calidad de su café a la vez que diversificar su oferta de productos, introduciéndolos en nuevas cadenas de valor.
La agricultura regenerativa permite a los caficultores elevar la calidad de su café y diversificar su oferta de productos. “Para nosotros no es correcto asimilar en la caficultura orgánica (libre de fertilizantes, herbicidas y pesticidas químicos), el modelo ideal de caficultura sostenible, pues por buena que parezca la producción orgánica, suele operar bajo el esquema tradicional de monocultivos cafeteros, que no contribuyen a mejorar el ingreso neto de los pequeños agricultores, ni a disminuir su dependencia de insumos externos.
La sostenibilidad es un concepto mucho más amplio, que abarca el ámbito ambiental, pero también el social y el económico y por ello nuestra propuesta es pasar del monocultivo de café a un sistema de cultivo biodiverso que resulte rentable para los productores en el mismo orden de prioridad que la preservación del ambiente. Según nuestro modelo de negocio, una familia cafetera que migra a un sistema de cultivo biodiverso, logrará incrementar su ingreso neto anual en por lo menos un 20% con cada nuevo proyecto productivo que establece en su finca. Por ejemplo, en nuestro trabajo más reciente con cerca de 100 familias cafeteras en la zona de Cundinamarca (área central de Colombia), hemos implementado con éxito pequeñas plantas de producción de humus de lombriz que se alimentan con los residuos de las propias fincas de café.
Cada familia cuenta con la infraestructura necesaria, además de la capacitación y asistencia técnica, para producir unas 12 toneladas anuales de humus de lombriz sólido de alta calidad y con la venta de este biofertilizante en el mercado local, nuestra expectativa es que cada una de ellas logre aumentar, al menos, en un 30% su ingreso neto actual.
SISTEMA DE CULTIVOS BIODIVERSOS
Continuar promoviendo una caficultura de monocultivos que no es rentable para el agricultor ni sostenible para el medio ambiente no debe ser una opción, ni tampoco se debe subsidiar con medidas asistencialistas de estado, como es el caso en tantos países productores del mundo.
De ahí la importancia de migrar a un sistema de cultivos biodiversos, que contribuya a incrementar la calidad del café y permita a los caficultores salir del mercado de commodities, pero no para abandonar la caficultura, sino para generar valor agregado, al tiempo que preservamos los suelos del planeta y los recursos naturales que dependen de estos. Estamos convencidos de que un café verdaderamente especial, es aquel que presenta unos atributos que solo se logran por la calidad del suelo donde se cultiva”.
LA PALMA & EL TUCÁN
Y como claro ejemplo del éxito del modelo que propone Biodiveral, encontramos la finca La Palma & El Tucán en Zipacón, un proyecto innovador de producción y comercialización de cafés especiales fundado en 2012 por el propio Felipe Sardi y Elisa María Madriñan.
Su modelo retó a la industria en Colombia con calidad, valor compartido y valor agregado y esta finca produce y exporta café verde con los más altos estándares de calidad bajo dos modelos de producción: trabajo colaborativo con familias caficultoras tradicionales y cultivos propios de variedades exóticas. La Palma & El Tucán ostenta el récord del precio por libra más alto pagado en la historia de Colombia desde 2015, habiendo alcanzado el pasado año, el precio más alto de todos, 300 dólares/por libra.
La innovación en sus procesos de producción agroecológica y en sus procesos de fermentación – procesos muy puristas en los que se respetan los azúcares propios del fruto del café y las colonias microbianas nativas que prosperan en él - los ha convertido en referentes reconocidos en la industria internacional y la calidad de sus cafés ha propiciado su presencia en los pódiums de más de 36 campeonatos nacionales de Baristas en Europa, Asia y Estados Unidos y, también, del Campeonato Mundial de esta disciplina, en el que en su última edición de 2019, la campeona, Jooyeon Jeon (Corea del Sur), y el tercer clasificado, Cole Torode (Canadá) participaron con cafés de La Palma & El Tucán.
“Después de 5 años de producir cafés especiales bajo el modelo convencional de monocultivo a base de aplicaciones químicas, en 2017 tomamos la decisión de hacer una transición hacia un modelo de policultivo orgánico soportado en la producción de nuestros propios Bio-Fertilizantes y controles biológicos.
Nuestra necesidad era clara, proteger el cultivo y suministrarle todos los nutrientes necesarios para obtener frutos de excelente calidad. Por ello decidimos apostar por un modelo de producción agroecológica donde el café creciera en asociación con otros cultivos, mejorara los suelos, y garantizara una agricultura limpia y en armonía con la naturaleza.
Hasta el momento, nuestro reto permanente había sido, precisamente, el desgaste de los suelos, debido a que la mayoría de nuestros lotes se encuentran en ladera. Con las aplicaciones continuas de fertilizantes químicos lo que en realidad estábamos fomentando era la lixiviación de nutrientes y la erosión, conduciendo así a niveles de baja fertilidad en el cultivo. Es así que para aumentar el porcentaje de materia orgánica, sembramos más de 120 árboles de sombra por hectárea (de 24 especies diferentes), y diseñamos y produjimos nuestros propios fertilizantes orgánicos.
Los resultados del cambio han sido muy satisfactorios. Además de aumentar la resiliencia de La Palma & El Tucán al cambio climático con la cantidad y variedad de especies nuevas que incorporamos, hemos conseguido mejorar la textura y porosidad de los suelos, la capacidad de intercambio catiónico y la retención de humedad de los mismos.
Esto ha contribuido a mejorar el cultivo y también ha enriquecido el suelo y el ecosistema en general. Las plantas no solo se han hecho más resilientes frente al estrés por sequía, sino que los nutrientes son ahora fácilmente asimilables por los cultivos. Con el paso del tiempo, las fertilizaciones con nuestros propios productos han empezado a ser más eficientes y además, han mejorado la productividad por árbol en más del 50% en solo tres años. Pero lo mejor es que este nuevo modelo de caficultura se ha convertido en un ejemplo para nuestros vecinos caficultores, con quienes ahora soñamos con transformar más y más fincas”.
*Puedes acceder a la revista Fórum Café nº83 completa aquí.
Desforestación: ¿El café, un problema o una solución?
La deforestación y la degradación forestal amenazan la integridad de los ecosistemas locales de todo el mundo y sus efectos contribuyen al cambio climático. Los productores de café de muchos países ya notan cambios en las temporadas lluviosas y secas, y todo apunta a que esta situación se puede agravar por cambios climáticos adicionales y que pone aún más contra las cuerdas a la producción de café.
Más de un centenar de ONG han lanzado la campaña ‘No te comas el bosque’ en la que piden a la Unión Europea que apruebe una legislación “firme, vinculante y estricta” que contribuya a frenar la importación de alimentos y otros productos que se hayan cultivado en bosques y selvas deforestados y garanticen que nada de lo que se consuma en Europa contribuya a destruir ningún ecosistema o viole los derechos humanos de sus poblaciones.
Según estas ONG, a escala mundial, la Unión Europea es responsable de más del 10% de la deforestación generada para cultivar, en tierras que antes eran bosques, productos como soja, aceite de palma, pastos para carne, cacao y, también, café. Sin embargo, aunque a lo largo del tiempo se ha intervenido en zonas boscosas para ganar terreno para cafetales, la deforestación resulta, mayoritariamente, más un problema que no un beneficio para la caficultura y así lo defienden entidades como Enveritas que tienen en marcha un ambicioso plan que monitorea la deforestación y aporta información a la industria más comprometida y a las partes interesadas sobre el terreno, para que puedan emprender planes que contribuyan a un futuro sostenible, en el que el café tenga un lugar.
“No hay duda de que el cultivo de café ha contribuido a la deforestación durante el siglo pasado, ya que las hectáreas cultivadas han crecido y a medida que surgían variedades de café que podían prosperar sin sombra, se ganó terreno al bosque, pero es una historia con muchos más matices de lo que muchos podrían pensar”, apunta David Browning CEO de Enveritas.
LOS BOSQUES Y EL CAFÉ SE NECESITAN
En varios orígenes de café de alrededor del mundo, explica, este producto se cultiva bajo la sobra de bosques perennes, por lo que, asegura, café y bosque se necesitan. “No solo los bosques sustentan al café, sino que en muchos lugares podemos comprobar como el café contribuye a la preservación de las áreas forestales. Por ejemplo, los bosques proveen de sombra a los cafetales para reducir la temperatura. Aseguran a las fincas una biodiversidad vital y también generan materia orgánica que sirve como fertilizante natural para los terrenos donde crece el café.
Los bosques facilitan la retención de humedad, ayudan a proteger las cuencas hidrográficas, a prevenir la erosión en las zonas cafetaleras y sirven de hábitat para las aves que comen insectos dañinos. Mientras que el café, por su parte, también tiene un papel protagonista en la preservación de las reservas forestales. Y como muestra lo que ha sucedido en varios orígenes, donde el valor económico de este producto es el que ha favorecido la preservación y protección de los bosques y sus inmediaciones con el objetivo de asegurar la continuación de la producción cafetalera y su contribución al PIB nacional”.
Según un informe elaborado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el mundo ha perdido 178 millones de hectáreas de bosque desde 1990, lo que correspondería, aproximadamente, a una superficie de 3,5 veces España. El ritmo de pérdida neta se sitúa actualmente en 4,7 millones de hectáreas/año, siendo el continente africano el que ha perdido más superficie neta en el periodo 2010-2020 con 3,9 millones de hectáreas, seguido por América del Sur, con 2,6 millones de hectáreas. En estos dos territorios, solo un 24% y un 17% de la superficie forestal cuenta con planes de manejo a largo plazo, frente al 96% de Europa donde la práctica totalidad de los bosques tienen programas específicos de explotación y conservación. El índice de deforestación en las zonas tradicionales de cultivo de café de un país a otro cambia, aunque la mayoría comparten los mismos desencadenantes: intereses y problemas económicos.
Cuando los precios del café bajan y las finanzas familiares se ven presionadas, los pequeños caficultores se ven obligados a recortar sus gastos. Esto comporta cambios como la renuncia a comprar gas para cocinar o para realizar determinados quehaceres de la finca y da paso a la tala de bosques para obtener madera como combustible.
Los hay, también, que se ven forzados por la situación a abandonar sus terrenos y emigrar, dejando las tierras expuestas a otras producciones más agresivas, ganaderos o leñadores. No son pocas tampoco las ocasiones, en las que los caficultores mantienen su producción, pero talan el bosque de su alrededor para vender los productos maderables o utilizar las tierras para la producción de alimentos de subsistencia y crianza de ganado que les aporten unos ingresos extras que contribuyan a su subsistencia. También es habitual que las áreas tradicionales de cultivo de café se vean envueltas por áreas urbanas en expansión y la tierra se venda para su urbanización o que se sacrifiquen áreas de bosque para ampliar la zona de cafetales e intensificar la producción de café en respuesta a la demanda del mercado.
“Está claro que la combinación de factores demográficos y factores económicos han contribuido a la deforestación. Si consideramos que nuestra población ha crecido de 2 mil millones de habitantes a 7 mil millones entre 1920 y 2020, no es atrevido pensar que hoy día, por ejemplo, mucha más gente se despierta por la mañana con una taza de café que un siglo atrás. Esta creciente demanda ha llevado a la expansión agrícola y a una sobreexplotación de los terrenos que ha comportado, a su vez, una degradación del suelo a lo largo de los años - el 80% de esta deforestación se debe a la agricultura intensiva -, lo que ha aumentado la presión para deforestar y encontrar nuevas áreas donde el café pueda crecer y prosperar”, explica David Browning quien matiza, “dicho esto, existen oportunidades para cambiar la trayectoria y así lo demuestran ejemplos como Brasil, donde durante los últimos veinte años la producción ha aumentado, pero la cantidad de tierra dedicada a la producción de café ha disminuido. Esto ha sido posible gracias a una serie de innovaciones y mejoras que la caficultura brasileña ha emprendido para aumentar su eficiencia agrícola y el uso de la tierra”.
LA DEFORESTACIÓN, UN PROBLEMA DE TODA LA CADENA DEL CAFÉ
Proteger a los bosques es proteger a los productores, a sus familias y al café, añade el CEO de Enveritas, quien insiste en la necesidad urgente de parar la deforestación para proteger los medios de vida de los caficultores, en las circunstancias actuales de cambio climático. Y es que a medida que aumentan las temperaturas globales, aumentan los riesgos relacionados con las lluvias, las plagas y las enfermedades. En este panorama, los bosques podrían desempeñar un papel destacado, mitigando estos efectos adversos, y el daño potencial de lluvias extremas o huracanes.
En esta cruzada, sin embargo, David Browning, recuerda la necesidad de caminar todos a uno, productores, industria y consumidores. “Muchos pequeños productores de café tienen recursos limitados y viven en la pobreza, lo que limita su capacidad para asumir la carga de la deforestación mundial como una responsabilidad. Es difícil concentrarse en resolver un problema global cuando les preocupa cómo proporcionar suficiente comida para su familia o cómo pagar los uniformes escolares. Es por eso que esta es una tarea que debe compartirse entre todos los interesados y participantes en las cadenas de suministro de café”.
Sin embargo, advierte, el gran riego que corremos como sociedad – y como industria y consumidores de café – es que la responsabilidad compartida puede convertirse fácilmente en ninguna responsabilidad. “Hay demasiados rincones donde esconderse entre la multitud. Es por ello que todos debemos dar un paso al frente si queremos lograr un cambio. Aquellos que se arriesgan a dar un paso adelante merecen ser destacados y reconocidos. No hay respuestas fáciles, pero necesitamos líderes valientes que estén preparados para asumir un poco más de su parte de culpa y un poco menos de su parte del crédito”.
MONITOREO DE LA DEFORESTACIÓN Y MÁS
Enveritas ha evaluado sobre una base estadísticamente sólida las condiciones ambientales, sociales y económicas de aproximadamente el 50% de la producción mundial de café, lo que representa más de 4 millones de fincas. La deforestación forma parte de esta evaluación.
“Estamos aprovechando las innovaciones tecnológicas que se han generado durante los últimos 10 años, y en particular los últimos 5 años, para mejorar la capacidad de monitoreo de la deforestación en el sector cafetero, a la vez que evaluamos las condiciones ambientales, sociales y económicas de cómo se cultiva el café. En nuestro trabajo aplicamos aprendizaje automático combinado con la verificación física del terreno y las imágenes satelitales de alta resolución y todo lo que recogemos, lo brindamos a los tostadores y exportadores de café para apoyar sus esfuerzos por reducir y mitigar la deforestación. Y es que el sector privado está estableciendo cada vez más objetivos de gran alcance para reducir y compensar su consumo de carbono, y los líderes de la industria están presionando para encontrar nuevas soluciones en la agricultura regenerativa.
Puede parecer que el sector público ha retrocedido en los últimos años en términos de acuerdos climáticos, pero en general, los responsables políticos de todo el mundo son más conscientes de los problemas ambientales que en décadas anteriores. Hoy en día, los consumidores también, comprenden mejor cómo sus acciones y compras contribuyen a nuestro planeta.
Monitorear la deforestación, nos brinda la oportunidad de poder trabajar con información mejorada para la toma de decisiones políticas o como medio para identificar y responsabilizar los usos ilegales. Y digo que nos brinda la oportunidad, porque ha sido en los últimos años, que las imágenes de satélite han mejorado lo suficiente como para ofrecernos una comprensión real y muy detallada de cómo la deforestación está evolucionando en algo tan específico como las áreas de cultivo de café.
Aunque es fácil desesperarse, es mucho lo que podemos hacer en las próximas décadas para revertir la situación y para conseguirlo, eso sí, debemos ser conscientes que la deforestación no puede evaluarse simplemente por sí misma, sino que para que podamos avanzar en el ámbito ambiental hay que evaluar y tener en cuenta, también, la situación económica y social de quienes producen el café. Solo así avanzaremos en el ámbito ambiental y también, de los derechos humanos, la lucha contra la pobreza y los derechos humanos y que nos convertirá, realmente, en una sociedad sostenible en todos los aspectos”, concluye David Browning CEO de Enveritas.
Fuentes
Enveritas, FAO
*Puedes acceder a la revista Fórum Café nº83 completa aquí.
Servicio Técnico, un valor al alza
A lo largo de los últimos años, en España la máquina de café espresso ha servido al tostador como un señuelo para captar clientes, hasta el punto que en la hostelería tradicional se considera que el proveedor de café debe suministrar y mantener la máquina. Y es en función de esto que cada tostador determina su modelo de negocio y opta por tener su propio servicio técnico, instalando y reparando él mismo las máquinas, o bien solicita parte de los servicios o todos ellos al fabricante o a alguna empresa especializada en servicios post-venta. En otros países europeos, por el contrario, donde existe una mayor penetración de máquinas automáticas, con unos niveles de inversión mucho mayores y unos costes de asistencia significativamente más altos, la contratación o compra de la máquina de café suele hacerla directamente el usuario final.
Para los fabricantes españoles, la situación en nuestro país es la consecuencia de un mercado grande, maduro y agresivo en precio, en el que no se trata de quién se encarga de qué, sino de quién paga qué. Esto, en su opinión, es lo que ha provocado que la máquina de café haya perdido buena parte de su valor. El usuario final la cuida poco (una prueba es la poca cantidad de productos de limpieza de máquinas que se venden en España comparado con, por ejemplo, Reino Unido. Otra prueba es la insuficiente utilización de descalcificadores) y descarga en el tostador su mantenimiento y puesta a punto, tensionando, a menudo, la relación entre ellos.
Esta situación ha sido así desde hace años y solo ahora parece que podría empezar a cambiar gracias a la progresiva profesionalización de la preparación y servicio de café, donde la máquina de café es igual de protagonista que el propio producto o el profesional que la manipula. Esta nueva dimensión ha favorecido que la máquina de café, como cualquier bien de equipo, esté recuperando un valor en sí misma que el mercado empieza a percibir. La máquina se percibe como un activo, y no como un centro de coste, y se estandariza su mantenimiento preventivo y correctivo, así como sus pautas de uso. En consonancia a este “nuevo” valor, los propietarios de estos equipos esperan la intervención de unos servicios técnicos/posventa que hoy día se han convertido ya, en un valor competitivo y diferencial para todas las firmas que los ofrecen.
PASADO DEL SERVICIO TÉCNICO: INTERVENCIÓN TÉCNICA DIRECTA
El modelo antiguo del siglo XX, en el que distribuidores y mecánicos vendían las máquinas y molinos a los establecimientos, y se encargaban de la instalación y reparaciones, cambió radicalmente en España cuando las empresas suministradoras de café empezaron a colocar directamente sus máquinas en los establecimientos, a cambio de asegurarse la venta de café en grano. Paralelo a ello, crearon sus propios servicios técnicos para atender las averías de sus clientes.
Posteriormente, las grandes empresas, algunas multinacionales, irrumpieron en el mercado y empezaron a externalizar el servicio posventa. Ello provocó que algunos fabricantes y distribuidores crearan sus departamentos de posventa, e incluso aparecieran empresas especializadas en estos servicios.
Las primeras máquinas de café, las llamadas máquinas de palanca, presentaban un funcionamiento cien por cien mecánico y las reparaciones estaban relacionadas principalmente con ello. Tanto la formación de los técnicos, como los recambios y las herramientas estaban enfocados principalmente, pues, a estos temas.
Con el tiempo y la incorporación de la electrónica a las máquinas de café espresso, displays y pantallas táctiles, conectividad y telemetría, máquinas multicaldera, y nuevas tecnologías relacionadas con el control de la presión, caudal, temperatura, etc., la variedad de componentes ha aumentado significativamente en el diseño de estos equipos, provocando una constantemente incorporación de nuevos contenidos en las formaciones de los mecánicos de los servicios post venta, nuevos soportes tecnológicos y nuevos elementos en los componentes de recambio, que nos llevan a un servicio mucho más tecnificado y especializado.
PRESENTE DEL SERVICIO TÉCNICO: RED DE DISTRIBUCIÓN CON TÉCNICOS PROPIOS Y CLIENTES CON RED TÉCNICA PROPIA
Actualmente, la necesidad de información está conectando la máquina de café con la nube, mediante conexión remota, lo que le permite al tostador obtener la información clave ad hoc y al momento. Y es en esta nueva realidad, que los técnicos no solo deben estar formados en mecánica, electricidad y electrónica, sino que lo deben estar también en las nuevas tecnologías de comunicación, aportando todo ello una nueva dimensión al servicio post-venta.
Estos técnicos trabajan para las propias empresas fabricantes - personal propio en las zonas en las que los fabricantes tienen un nivel alto de actividad- para servicios técnicos locales que dan servicio a diferentes tostadores e incluso fabricantes - en las zonas con menor presencia de la marca o densidad de maquinaria; o para grandes empresas de servicios posventa cada vez más generalistas, con un amplio portafolio de marcas.
No existen fórmulas universales, pero en lo que si coinciden los tres modelos es que los fabricantes están más que nunca detrás de la formación de estos técnicos que han dejado de ser simples mecánicos.
Y es que la posición de los principales fabricantes de máquinas de café espresso en el mercado les obliga a continuar liderando la evolución del sector a base de innovación en sus productos pero también en sus servicios posventa directos o a través de terceros.
En los últimos años han aumentado las necesidades de los clientes para agilizar la gestión de su parque de maquinaria. Y gracias a la innovación de la conectividad en las máquinas de café, no solo se puede recopilar ya, información de las tendencias del consumo en los establecimientos, sino también predecir y organizar los mantenimientos y reposiciones necesarias para mantener las máquinas operativas y en las mejores condiciones. Y es que hoy en día es necesario acompañar a las máquinas de unos servicios que también son productos en sí, convirtiendo, además, el “Customer Support” en un valor diferencial y competitivo para las firmas fabricantes.
DE MECÁNICOS A CUSTOMER SUPPORT
En este nuevo escenario, el técnico se transforma en una figura customer support o customer care, con mayores funciones en todo aquello relacionado con el asesoramiento y el control de la calidad. Por el contrario, las soluciones más orientadas al segmento profesional requerirán cada vez más, una red más formada y especializada para hacer frente a la evolución de la tecnología en las máquinas de café espresso.
Las maquinas conectadas van a tener mucho que decir. La principal diferencia entre una máquina digitalizada y otra que no lo está es la obtención de la información necesaria para permitir realizar acciones preventivas antes de que suceda el problema. Además, gracias a las nuevas soluciones de conectividad, el técnico podrá tener la lectura del diagnóstico de la máquina de café antes de desplazarse al establecimiento, por lo que puede ir preparado para solventar con más eficacia y rapidez cualquier problema, reduciéndose, pues, los tiempos perdidos de trabajo de la máquina y mejorando la eficacia del servicio. Actualmente, los equipos empiezan a poder notificar averías, necesidades de mantenimiento, incluso permitirán hacer análisis predictivo de fallos y ya hay fabricantes que ofrecen la supervisión remota de sus máquinas conectadas mediante innovadores sistemas basados en el Internet de las cosas, IoT.
DIGITALIZACIÓN A FAVOR DE LA EXCELENCIA EN EL SERVICIO
A pesar de las ventajas de estos sistemas en la eficacia del Servicio Técnico, lo cierto es que la velocidad de digitalización del mercado español de máquinas de café espresso no es la más rápida que se podría desear. Y es que a pesar que los fabricantes españoles están en la vanguardia del sector, sus clientes, la hostelería y los tostadores, que son quienes adquieren las máquinas y servicios, están detrás en digitalización respecto a otros sectores y otros países, lo que, inevitablemente está enlenteciendo la transformación.
Los fabricantes de máquinas de café, sin embargo, esperan que esta tendencia pueda revertirse pronto, seguros del papel vital que juega la digitalización en la competitividad de cualquier empresa, incluidas las del sector hostelero y tueste de café.
A través de la digitalización, defienden, se consigue trabajar con una mayor eficiencia y lograr una absoluta trazabilidad para poder responder a la actual demanda de soluciones rápidas y respuestas inmediatas que se exigen a los servicios técnicos. Además de ayudar a reducir costes y obtener datos para su posterior análisis y así avanzar hacia la excelencia del servicio.
EL FUTURO DEL SERVICIO TÉCNICO, HOY
El futuro ya se puede observar en otros productos y máquinas, donde se utilizan dispositivos conectados online que facilitan y organizan la actividad de los técnicos, además de proporcionar una comunicación con el cliente sobre el estado de sus máquinas y servicios, aportando transparencia a la actividad y mejorando la coordinación entre los actores de la posventa.
Los técnicos han dejado de ser simples mecánicos. Además de electricidad, mecánica y electrónica deben dominar las nuevas tecnologías de comunicación
La clave del éxito, aseguran los fabricantes, reside en que la digitalización sea una ayuda para el usuario pero que a su vez sea simple para el propio técnico que tenga que instalar y asistir. Y todo esto, depende directamente del diseño de la tecnología y del equipo de soporte que haya detrás de la red.
Es así que para optimizar al máximo el trabajo de sus servicios técnicos, las empresas más punteras del sector han empezado a desarrollar herramientas específicas, lo que les permite agilizar y mejorar la efectividad y diligencia del servicio. Este es el caso, por ejemplo, de una empresa que ha desarrollado una App móvil y un portal B2B, para la gestión de las peticiones con los técnicos, a través de la cual este puede contactar directamente con el establecimiento, consultar el historial de intervenciones en la máquina, dictar las observaciones de reparación, asignar las piezas sustituidas, o bien adjuntar imágenes y firmar digitalmente los partes de trabajo, entre otras funciones.
La asistencia técnica continúa siendo, pues, un elemento fundamental y la incorporación de nuevos servicios que permitan ofrecer una mayor cobertura y ser más eficaces sigue siendo una prioridad para los fabricantes de máquinas de café.
PARQUE NACIONAL DE MÁQUINAS DE CAFÉ ESPRESSO
El parque actual de máquinas de café espresso tradicionales en España se estima entorno a unas 270.000 - 300.000 unidades. Sin embargo, todo apunta a que las consecuencias de la pandemia de la COVID-19 provocará el cierre de entre un 20% y un 30% de los establecimientos hosteleros de nuestro país, por lo que esta cifra podría reducirse notablemente estos próximos meses.
La vida media de una de estas máquinas de café espresso está entre los 7 y 10 años, dependiendo del tipo de instalación, su rendimiento y los cuidados que reciba la máquina. Realizar, por ejemplo, un correcto mantenimiento preventivo y la instalación de recambios originales en las reparaciones contribuyen de forma importante a alargar esta vida útil.
Actualmente, según información de los fabricantes, los servicios que más demandan los clientes finales a los departamentos post-venta son los relacionados con incidencias comunes con la regulación de molienda, temperatura, presión, preinfusión, ... Así como el cambio de piezas por desgaste y obstrucciones, tipo gomas, duchas, electroválvulas y chicles. Sin embargo, las averías mecánicas empiezan a desaparecer a medida que crece el número de máquinas digitalizadas, ya que el mismo software ayuda a resolver muchos de estos problemas.
Por su parte, los servicios más requeridos por parte de los tostadores son formaciones, instalaciones, puestas a punto de equipo y cada vez más, peticiones de conectividad de la máquina para su control remoto, ya que la información decisional que aporta es de ayuda en sus business model. De este modo, pueden gestionar los consumos y optimizar las ventas; recibir alarmas para prever los manteni- mientos y averías; y llevar a cabo de forma remota la geolocalización de todos los equipos en aras de una mejor gestión y rentabilidad.
Fuentes
Rafael Muñoz de Gispert -R+D Director en Iberital
Vicenç Batlle - Director General de Caffè d’Autore
Javier Villarreal - After Sales Manager de Quality Espresso
Patricia Timor - Responsable del Servicio Técnico de Crem International
Davide Beccaglia - Customer Support Director de Rancilio Group
Carles González - Coffee Competence Manager de Rancilio Group
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Agaete apuesta por la D.O. para su café
Hasta ahora, este ha sido el único enclave en Europa donde se producía café pero la aparición de nuevas iniciativas en otros puntos ha empujado a los responsables del Café de Agaete a plantearse, entre otras iniciativas, la Denominación de Origen y promover concursos de calidad para conseguir mayor proyección para su café.
En los últimos dos años, la inercia de trabajo iniciada en el año 2003, cuando se puso en marcha el Programa de Valorización del Café de Agaete, ha ido disminuyendo paulatinamente, hasta que a mediados del pasado año se decidió articular el desarrollo de un espacio de cocreación de mesas de trabajo para buscar soluciones a los retos de futuro del café en el Valle, máximo cuando en la actualidad ya comienzan a surgir otros cultivos de café en el archipiélago y en otros puntos de Europa, que nos invita a no quedarnos inmóviles y aprovechar el recorrido ya realizado y no caer en el estancamiento.
Actualmente, la superficie total de terrenos dedicados al café en Agaete está en torno a las 3ha. En general, se trata de producciones básicamente complementarias a otros cultivos tropicales y cítricos, habiéndose alcanzado en los últimos años una producción media anual de unos 4.000 kilos de café oro listo para tostar. La mayoría de los productores no lo son a título principal, ya que desarrollan otro tipo de actividades profesionales, teniendo muchos de ellos la propiedad de las tierras de forma hereditaria, en parcelas con superficies de entre 500 m. a 2000 m. - las grandes extensiones, más de 2.500 m. pertenecen a un número muy limitado de titulares -.
EL CAFÉ UN ACTIVO ECONÓMICO PARA EL VALLE
En la base filosófica y planteamientos iniciales del Programa de Valorización del Café de Agaete, se postulaba que la comercialización de este café se realizara con una marca única de forma colectiva con la totalidad de los productores locales bajo la denominación de “Café de Agaete”. Para este cometido y dada la ausencia de maquinaria y elementos técnicos de transformación, se planteó la necesidad de dotar a la Asociación para el Fomento y Desarrollo Agropecuario de Agaete Agroagaete con un equipamiento moderno, que actuara como centro de transformación de toda la producción local, con la puesta en servicio de la “Casa del Café de Agaete”, Centro de Interpretación, Transformación y Degustación del Café, en colaboración con el Ayuntamiento de Agaete, el Cabildo Insular de Gran Canaria, y la Obra Social de la Caja de Canarias. Casi 18 años después, el recurso sigue sin estar en servicio, y sus obras totalmente finalizadas, a la espera de su inauguración.
De hecho, su puesta en funcionamiento tiene una gran demanda social, ya que hasta el momento, el café se ha convertido en un recurso cultural y turístico importante de Agaete y de la isla de Gran Canaria para el disfrute de todos. Ha repercutido positivamente en la actividad económica del municipio y la vinculación producto-territorio ha hecho que se convierta en un reclamo principal junto a las riquezas naturales y paisajísticas del municipio, que hacen programar a los visitantes una cita casi obligada para conocer el norte de la isla y este cultivo histórico.
FORMACIÓN, CONCURSOS Y DENOMINACIÓN DE ORIGEN
Actualmente existen tres fincas agrícolas totalmente consolidadas a nivel empresarial que funcionan como recurso turístico, y una de ellas como escuela de café, articulando un programa de visitas en torno a la temática de esta bebida aromática, con una experiencia completa desde el cultivo hasta su degustación final.
Es así que estamos convencidos que si pudiera darse una apuesta decidida y coordinada entre las administraciones a nivel municipal, insular y regional, con una estrategia conjunta para acometer cada uno de los retos finalistas del Programa de Valorización del Café de Agaete, podríamos contar con la primera denominación de origen de este producto en un marco europeo con todos los beneficios que conlleva el citado reconocimiento a nivel gastronómico.
Para conseguirlo, en las mesas de trabajo para buscar soluciones a los retos de futuro del café en el Valle, se han sentado las bases para dar un giro al sector y a la plataforma social Agroagaete, como entidad representativa del café de Agaete, de modo que se pueda potenciar la marca propia del café de Agaete y trabajar su convivencia armoniosa con el resto de submarcas de los cafés de las fincas de este territorio. También se apuesta por la certificación externa de calidad ecológica; la conformación de un panel de cata local; un plan de formación personalizado para el sector; la generación de un semillero colectivo anual para aumentar la producción y superficie de cultivo; y la convocatoria de un concurso de la Taza de la Excelencia de café de fincas, entre otros proyectos que contribuyan a la consolidación y proyección del café de Agaete.
Germán Sosa Perdomo - Grado en Relaciones Laborales y Recursos Humanos. Colaborador Técnico Asociación Agroagaete
José Manuel Sosa Medina - Ingeniero Técnico Agrícola, Colaborador técnico Asociación Agroagaete, Presidente y equipo directivo de la Asociación Agroagaete
CRECE EL PARQUE CAFETERO DE AGAETE
El pasado mes de mayo, el Cabildo de Gran Canaria entregó 5.000 cafetos a Agroagaete para incrementar la superficie de cafetales del municipio y proseguir con la recuperación de este cultivo. Los plantones distribuidos eran de la variedad Typica, procedentes de semillas de cafetales antiguos del Valle de Agaete y que han sido cultivados en los viveros de la Granja Experimental del Cabildo, donde también disponen de viñas y olivos para entregar a los agricultores de la zona. En los invernaderos de esta Granja se atesoran más de 10.000 ejemplares de 60 especies frutícolas del mundo, siendo las de café las más cuantiosas, con más del 50% de las plantas que allí se produce para distribuir. De hecho, la producción de café se incrementó hace una década y de una media anual de 1.000 plantas se ha llegado ya a las 5.000-6.000 actuales.
Según diversos documentos, la llegada del café a las Islas Canarias se debe a los inmigrantes canarios que a finales del siglo XVIII volvía a sus hogares desde Venezuela y Cuba. Fue en esa época que el rey Carlos III ordenó al Marqués de Villanueva del Prado, Alonso Nava Grimón, la creación del Jardín Botánico de La Orotava, un lugar donde catalogar las plantas y árboles de las Islas Canarias y cultivar semillas y plantas exóticas, entre ellas, el café. En poco tiempo, el café llegó a Gran Canaria desde Tenerife y en el Valle de Agaete encontró calidad de suelo agrícola y las condiciones climáticas ideales para su producción.
Hace unos setenta y cinco años, en Agaete se producían unas diez toneladas anuales de café, que poco a poco fueron disminuyendo hasta casi desaparecer, con poco más de 400 kilos de producción. Era el año 2002 y fue entonces cuando Agroagaete junto al Cabildo de Gran Canaria, el Ayuntamiento de Agaete, y Aider Gran Canaria decidieron recuperar el cultivo para el Valle.
Poco tiempo después, Albert Solà, el que fuera primer director de Fórum Café, conoció el Café de Agaete y tras probarlo dio cuenta del potencial de los granos producidos en el Valle. Solà lo definió como un café de gran calidad, poco ácido, de cuerpo estable y de gusto afrutado y dulce que recuerdan al chocolate y a la regaliz.
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Café convencional: ¿Más saludable que el café orgánico?
Nikolai Kuhnert es catedrático de química analítica en la Universidad Jacobs de Bremen (Alemania). Ha trabajado en Oxford, Cambridge y en la Universidad de Surrey, en Inglaterra y también pasó, en el 2012, ocho meses en España, colaborando con el CSIC en Madrid y Murcia. Su reciente trabajo de investigación concluye que el café orgánico contiene menos cantidad de ácido clorogénico que el café regular, sin que las investigaciones hayan podido determinar, todavía el porqué.
El ácido clorogénico (CGA) está presente en muchas frutas y vegetales pero el café es el principal proveedor natural para la nutrición humana. El café contiene alrededor de un 10% de este tipo de ácidos en los granos, de los cuales 200 mg terminan en una taza de café (200 ml) -en un grano verde de café Arábica hay 45 CGA diferentes-.
El papel de las CGA en la planta y granos de café, a día de hoy, sigue siendo especulativo. Aunque se supone que sirve para proteger a las plantas del estrés biótico, por ejemplo, virus, bacterias, hongos y herbívoros. En los seres humanos, por el contrario, su función está clara. El ácido clorogénico actúa como antioxidante y se le atribuyen numerosas propiedades beneficiosas para la salud, algunas de las cuales han sido tema de estudio en numerosas investigaciones recientes, evidenciándose su efecto hipoglucemiante, antiviral, hepatoprotectora y nutraceútica. Es, por ejemplo, en el ácido clorogénico que se identifica entre otros efectos, la bondad del café contra la diabetes 2; para actuar como paliativo frente a una lesión isquémica o como protector contra el deterioro de la visión y posible ceguera por degeneración de la retina.
El catedrático Nikolai Kuhnert en su estudio sobre la composición química de las plantas indicadas para el consumo humano y la química detrás del procesamiento de alimentos (tostado de café, fermentación de té y cacao, etc.), se ha marcado como objetivo averiguar cuál es la composición química de los alimentos procesados, cómo se forman estos compuestos y cuáles son sus consecuencias para la salud humana. Las conclusiones en su trabajo con el café han puesto en evidencia diferencias importantes entre los cafés orgánicos y convencionales, las cuales van mucho más allá de su método de producción y que tienen al ácido clorogénico como principal protagonista.
“Ha sido un trabajo colaborativo entre el profesor Daniel Granato de Brasil y nuestro grupo de investigación. El profesor Granato visitó alrededor de 70 plantaciones de café brasileñas y tomó muestras, que envió a Alemania para su análisis químico”, explica Kuhnert. “Lo más interesante ha sido la evidencia de que el café orgánico contiene, de media, menos cantidad de CGA en comparación con el café cultivado convencionalmente. Por el momento, no sabemos a qué responden estas diferencias y solo podemos especular”.
Ahora bien, todo indica, según el propio Kuhnert, que el CGA es un compuesto de defensa producido por la planta bajo estrés y por tanto, el café orgánico parece estar menos estresado en comparación con el café convencional. “Esto es contrario a la intuición, ya que supondría que el uso de pesticidas da como resultado una menor exposición a organismos-plaga. Es por ello que asumimos que los pesticidas en sí mismos inducen el estrés a la planta, actuando como un disparador externo para la producción de CGA. Este mismo efecto ya lo hemos visto en otras plantas expuestas a toxinas ambientales, donde la producción de metabolitos secundarios aumenta”.
Según Nikolai Kuhnert, diferentes prácticas orgánicas en diferentes países podrían dar diferentes resultados en la cuantificación de ácidos clorogénicos, aunque la mayor diferencia vendría dada por la variedad del cafeto. “Asumiría pequeñas diferencias respecto a los cafés orgánicos según su origen, aunque su variedad es la que realmente marcará el resultado, ya que el café Robusta produce un nivel mucho más alto de CGA que el café Arábica”.
PRODUCCIÓN SOSTENIBLE VS. SALUD
El contenido de ácido clorogénico en el café ha sido hasta el momento un elemento importante para identificar este producto como una bebida saludable. Con los resultados del estudio de Kuhnert, el debate más/menos saludable para nuestra salud pero más/menos saludable para el medio ambiente gana protagonismo.
“El café orgánico se mantiene como una opción saludable debido a inexistencia de residuos de pesticidas en su producción y en el producto (aunque es un problema menor en el café, ya que la piel de la cereza de café expuesta a los pesticidas se quita durante el procesamiento). El café orgánico también mejora la sostenibilidad y la biodiversidad. Es por ello que nuestros hallazgos no deben disuadir a los clientes de seguir comprando café orgánico. Sin embargo, los resultados sugieren que si un cliente de café orgánico desea beneficiarse completamente de los efectos positivos de los CGA sobre la salud, necesita disfrutar una taza más al día para compensar las cantidades reducidas de este ácido en estos cafés”, aclara Nikolai Kuhnert.
ANTIVIRAL COVID-19
Entre los proyectos más inmediatos de este catedrático está seguir estudiando la química del café, pero también analizar las posibilidades de CGA contra la COVID-19. “Tenemos un proyecto que analiza el efecto de los CGA en las infecciones por el coronavirus. Hace unos años demostramos que los CGA del café tienen un efecto antiviral sobre la influenza. La idea, ahora, es que los CGA del café detengan la interacción entre la proteína de la COVID-19 y su receptor humano en el tracto respiratorio superior y digestivo. Por tanto, el café podría reducir el riesgo de infección”.
Un trabajo que de dar buenos frutos será, sin duda, una excelente noticia.
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La trazabilidad en el café
¿En qué punto de evolución se encuentra la trazabilidad en el mundo del café?
La trazabilidad en el café es todavía una cuestión muy nueva. Esto se debe a la complejidad de su cadena de suministro y también a la dificultad de llegar a las fincas pequeñas y remotas donde se genera información vital para cualquier buen sistema de trazabilidad que se precie de ello. Y aunque muchos hablan de trazabilidad, la realidad es que este sistema de rastreo se utiliza muy poco en el mundo del café, no nos engañemos. Pero los consumidores nos lo exigen y las ventajas que nos puede aportar la información recogida hace que valga la pena apostar por ello.
¿Por qué es importante instaurar la trazabilidad en el café? ¿A quién beneficia?
Los beneficios son muchos. Los datos que aporta este sistema son muy poderosos a todos los niveles y pueden ayudar a cualquier actor de la cadena de valor del café en su tarea y objetivos. Los datos que podemos capturar ayudarán, por ejemplo, a que los caficultores puedan mejorar la eficiencia de sus fincas y rutinas de trabajo y, también, sus ganancias. El tostador podrá saber en tiempo real, donde está disponible el café verde que busca y establecer una relación directa con el origen. Mientras que para el cliente final, los datos recogidos a lo largo de todo el proceso le proporcionan una ventana única a través de la que ver y conocer el café qué está degustando.
¿Puede, pues, la transparencia de esta trazabilidad transformar el mercado del café?
Insisto, todavía estamos en la infancia de la transparencia en el café. Esta industria es compleja con múltiples actores involucrados en cada ‘transacción’ y queda mucho que hacer. Ahora bien, a largo plazo poder disponer de todos los datos nos ayudará a mejorar la calidad del café, proporcionará al caficultor una mejor posición para la negociación de precios y mejorará el comercio directo a todos los niveles.
¿La trazabilidad puede contribuir, también, a la sostenibilidad del café?
La sostenibilidad es una palabra importante hoy en día sin una definición clara para todos. Para nosotros, ECropOrigin, la sostenibilidad significa que uno puede ganarse la vida con su negocio y es así que apostamos por utilizar la trazabilidad como herramienta para registrar todos los datos que ayudarán a aumentar la producción, administrar los gastos y mejorar la calidad.
El sector ¿está suficientemente preparado para avanzar en la trazabilidad del café?, ¿se puede garantizar su trazabilidad al 100%?
El 100% nunca es posible, pero mediante el uso de sistemas de trazabilidad y algo de inteligencia artificial y auditoría independiente podemos acercarnos. Por lo general uno de los mayores problemas es recoger los datos en la finca. Para nosotros, sin embargo, estos datos son claves para poder garantizar una trazabilidad honesta de inicio a fin y por ello hemos desarrollado un sistema de trazabilidad que contempla una versión offline dirigida a este primer eslabón para que los productores puedan recoger todo los datos de la finca y luego volcarlos al sistema en los puntos de entrega de cerezas donde normalmente, sí disponen de conexión a internet.
Entre la información que pueden aportar hay datos tan simples pero a la vez tan importantes como los registros de trabajo en sus fincas, una información que a posteriori puede ayudar, por ejemplo, a mejorar el rendimiento de esa explotación cafetera y a conseguir certificaciones de comercio justo, ya que se registra el peso y el pago que se hace a cada uno de los trabajadores.
También recogemos información en las cooperativas / instalaciones de procesamiento, dejando constancia de los parámetros de secado de cada café o los métodos de fermentación utilizados, entre otros. Rastreamos los datos de transporte y exportación y del tostador, de manera que una vez completado toda la cadena, se genera un código QR que da acceso a toda la información y que cualquier eslabón puede compartir como muestra del valor diferencial de su producto. Además, como el programa permite proporcionar el seguimiento e inventario del café en tiempo real, hemos dado un paso más en la trazabilidad y aprovechando toda la información recogida hemos incorporado al sistema un marketplace para la venta de los cafés rastreados.
¿Qué tendencias se sumarán a la trazabilidad del café?
En el futuro inmediato vamos a ver una creciente demanda de clientes finales en el sector de cafés especiales, muy interesados en saber quién produjo el café que están bebiendo y qué sucede entre el campo y su taza. Poder ofrecer estos datos y asegurar a tus clientes que el caficultor va a recibir lo justo por la venta de su café, va a marcar la diferencia. También veremos como muchos agricultores convencidos de los beneficios de ir por delante de la competencia, se van a sumar al carro de la trazabilidad.
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El café en Oriente Próximo
En Oriente Próximo, hasta no hace muchos años, las madres y las abuelas tostaban granos de café verde en casa, los molían y luego los hervían y servían al estilo “café árabe”. Hoy en día, este tipo de preparación ha pasado a formar parte del amplio compendio de tradiciones de los países de esta parte del mundo y el café se está rejuvenecido en los Emiratos Árabes Unidos, Irak, Turquía, Arabia Saudita, Kuwait, ... de mano de un floreciente y destacado interés por el café de especialidad; modernas y atractivas cafeterías; y cientos de nuevos tostadores y microtostadores salpicados por todos estos territorios.
Los pioneros de la industria del café de especialidad aterrizaron en Oriente Próximo hace unos 13 años, preparando el terreno a una comunidad que hoy día cuenta ya con más de 70 tostadores especializados, solo, en los Emiratos Árabes Unidos; un número similar en Arabia Saudita, donde el consumo de café de especialidad no deja de crecer de forma trepidante; y un macrocentro logístico de 7.500m2 exclusivo para el café, en la zona franca del puerto de Dubai, considerada la número uno del mundo por sus innovadoras infraestructuras y servicios de primer nivel.
La crisis provocada por la COVID-19 ha afectado, como no, a tostadores y hostelería de estos países, pero tras la incertidumbre inicial, la mayor parte de las empresas han logrado adaptarse rápidamente a la nueva situación, lo que les está permitiendo seguir evolucionando en un mercado ansioso por seguir creciendo en el segmento de la especialidad.
María Eduarda Pavani es la fundadora y propietaria de Três Marias Coffee, una empresa emiratí especializa en el café de especialidad en todos sus formatos, verde, tostado, en grano, soluble y en cápsula. Su firma es, en estos momentos, uno de los operadores más importantes de Oriente Próximo, y su profundo conocimiento de la evolución del mercado del café en la región la avala para augurar un prometedor futuro para este producto en estos territorios. Mientras esto llega, el reto es consolidar la demanda y educar a los consumidores árabes, bebedores de café desde el siglo XV, en las nuevas tendencias del café.
LA REVOLUCIÓN DEL CAFÉ
“La irrupción del café de especialidad en Oriente Próximo no va más allá de una década atrás y vino inicialmente propiciada por la demanda de expatriados americanos, asiáticos y europeos, instalados, sobre todo, en territorios como Emiratos Árabes Unidos, un país que al cabo del tiempo ha acabado abanderándose como el motor de la revolución cafetera en la región.
Hoy día, el interés de los consumidores locales por los cafés de más alta calidad es también evidente y en países como el Reino de Arabia Saudita destaca una solida y floreciente comunidad cafetera, integrada por una nueva generación de consumidores, muy entusiasmada con las cafeterías de tercera ola, que han abierto desde hace tres o cuatro años aquí, a imagen y semejanza de las que podemos encontrar en cualquier ciudad europea, australiana o norteamericana.
Y si todo esto es así, lo es, en parte también, porque no debemos pasar por alto que la comunidad árabe ha sido desde tiempos inmemorables, una apasionada del café.
DEL QAHWA AL ESPRESSO
Los consumidores de los países de Oriente Próximo están abiertos, en general, a probar nuevos cafés, nuevos orígenes, cafés procesados por diferentes vías y preparados, también, con diferentes métodos, aunque en la nueva “movida” del café de especialidad en la región, el café de Brasil y el Etíope son los preferidos y el espresso y el latte español - café con leche -, las elaboraciones más populares.
El café se toma indistintamente en casa y fuera de casa, aunque es cierto que a la gente de aquí les encanta salir y pasar tiempo en las cafeterías. En países como Arabia Saudí, este año han flexibilizado la normativa que antes exigía a los establecimientos de hostelería segregar a sus clientes masculinos y femeninos, con lo que el café ha incrementado más aún si cabe, el carácter social que de por sí ya tienen en la región, donde esta bebida es un ritual obligado durante la visita a la casa de cualquier amigo o familiar.
NUEVA DEMANDA EN TIEMPOS DE COVID-19
Estos últimos meses, a causa de la situación de COVID-19, la demanda de café para consumo en el hogar ha aumentado. En empresas como la nuestra, Três Marias Coffee, hemos pasado de enfocar por completo nuestra estrategia dirigida a la capacitación y negocios B2B a mirar hacia el comercio electrónico, que tiene como cliente final al consumidor doméstico y para el que hemos ampliado nuestro catálogo de productos.
En él hemos incluido nuevas soluciones como café instantáneo y cápsulas, elaborados exclusivamente con cafés de especialidad. En la región son todavía muy pocas las empresas que ofrecen cápsulas de este tipo de café y personalmente creo que ofrecer soluciones que faciliten la accesibilidad a los cafés de la más alta calidad es la mejor vía para poder promocionar y hacer más grande este segmento del mercado. Esperamos, pues, que cada vez más empresas apuesten por ello.
UN MERCADO DE OPORTUNIDADES
De hecho, a medida que la industria del café se involucra y se desarrolla en los países de Oriente Próximo, el número de tostadores crece también, habiéndose afianzado, además, sólidas y prósperas colaboraciones entre operadores internacionales y locales, como es nuestro caso con Ally Coffee, empresa estadounidense especializada en la importación de micro lotes.
La “revolución” del café en Oriente Próximo ha convertido además, a este mercado en un objetivo interesante para muchos profesionales del café que se han fijado en estos países para seguir desarrollando su carrera profesional, con lo que muchos se han lanzado a crear nuevas marcas de café. Pero, como en todos los lugares, emprender no resulta fácil e igual que han aparecido muchas nuevas firmas cafeteras los últimos años, hemos visto también como otras tantas cerraban, sobre todo porque no entendían el mercado.
Para conseguir prosperar es necesario un proyecto único y un valor para agregar. Y es que, como en cualquier mercado nuevo, al principio, la escasez de oferta es protagonista. A ella le sigue cierta demanda y una vez esta se establece, aparecen nuevos jugadores hasta que, finalmente, el mercado se satura. Una vez esto sucede, los clientes tienen ante si una posibilidad de opciones inmensa.
Con el tiempo, sin embargo, el creciente conocimiento del producto “educará” a los clientes quienes se volverán leales a la calidad y a su constancia. Pues bien, creo que en Oriente Próximo estamos, exactamente, en este punto. En estos momentos existen ya muchísimas opciones, pero todo apunta a que solo las marcas y empresas ligadas a la calidad de su café y con capacidad para mantenerla a lo largo del tiempo, seguirán.
El futuro del café de especialidad en Oriente Próximo es muy brillante. El consumo de café crece año a año y la comunidad se está involucrando mucho. Cada vez son más los que ofrecen programas educativos, y los cursos siempre atraen la atención de muchos alumnos, lo que nos muestra el interés que hay por saber más sobre la industria de este producto y convertirnos en profesionales en este campo”.
María Eduarda Pavani - Três Marias Coffee
EL CASO DE LOS EMIRATOS ÁRABES UNIDOS
Emiratos Árabes Unidos (EAU) es el territorio que abandera la revolución del café de especialidad en Oriente Próximo. En 2019, el café en los EAU alcanzó un valor de venta de 200 millones de dólares, representado alrededor del 10% de todo el café consumido en la región (Fuente Coffeebi). El país, formado por siete emiratos federados: Abu Dabi, Ajmán, Dubái, Fuyaira, Ras al-Jaima, Sarja y Umm al-Qaywayn, es la 30 economía mundial y uno de los mercados más dinámicos de la región, con Dubái como punto focal de la innovación cafetera.
El estatus de la ciudad de Dubái - capital del emirato del mismo nombre - como importante centro de viajes global ha atraído a múltiples cadenas de cafeterías occidentales como Dunkin’ Donuts (1997), Costa Coffee (1999) o Starbucks (2000). El top 10 de estas cadenas a día de hoy, incluye además de las tres ya citadas, Tim Hortons, Caribou Coffee, Caffe Nero, Gloria Jean’s Café, Café Bateel, Krispy Kreme y Blends Brews, sin que en el horizonte se vislumbre nada, ni tan siquiera las restricciones provocadas por la COVID-19, que pueda entorpecer la buena marcha de este segmento de la hostelería emiratí, cada vez es más fuerte a medida que crece el apetito de los consumidores por las firmas occidentales y el café de especialidad.
Pero incluso en este mercado cada vez más concurrido de más de 1.200 cafeterías de marca, hay sitio para nuevas propuestas, según el estudio de Allegra “Project Café Middle East 2019”, que pronostica un crecimiento significativo del sector durante los próximos cinco años, incluido el segmento de cafeterías de especialidad que desde mediados de la década de 2000, ha experimentado en los EAU un gran crecimiento, a base de inversión nacional y extranjera, y ejemplos de éxito como Tom and Serg Café, considerada, por muchos, como la mejor cadena de cafeterías de la tercera ola de los EAU; Coffee Planet, de origen británico, Dubai’s Mokha o Walter’s Coffee Roastery, entre otros muchos.
Según la encuesta de Allegra realizada a más de 200 líderes de la industria y recogida en “World Coffee Portal”, el 88% de los consultados cree que todavía hay mucho potencial de crecimiento en el mercado de cafeterías de marca de los EAU. Las respuestas evidencian, eso sí, cierta “preocupación” por la más reciente aparición de cafeterías de especialidad en este mercado, pues, aseguran, “están ejerciendo presión sobre las empresas existentes, ya que compiten por una parte del gasto de los consumidores”. Y es así que más de la mitad de los líderes de la industria encuestados por Allegra citan el aumento de la competencia como uno de los mayores desafíos al que se enfrentan actualmente, además del de encontrar soluciones prácticas que cubran el gran consumo de conveniencia, típico en esta región.
Con su estilo de vida acelerado y una sociedad multicultural muy activa, asegurar para una firma que su café esté disponible en cualquier momento y en cualquier lugar de Dubái, es crucial. Tanto es así, que Costa Coffee abrió su primera cafetería de autoservicio en los Emiratos Árabes Unidos en 2017 e incluso fue noticia por probar una entrega con drones desde su tienda de Jumeirah Beach Road después de que el 82% de sus clientes dijeron que estarían felices de usar el servicio ‘Café-helicóptero’.
Y es que el apego de los emiratís por el café es cosa seria, y una tradición heredada de generación en generación. Una demostración de la importancia cultural de esta bebida para el país es la inauguración hace ya unos años del Museo del Café en Dubái, donde se recoge todo tipo de información sobre el origen de este producto, su presencia en Oriente Próximo a lo largo de la historia y los rituales del café más populares de la región.
Fuentes
Project Café Middle East 2019, World Coffee Portal, Research and Markets.
*Puedes acceder a la revista Fórum Café nº84 completa aquí.
2021, un año cafetero por escribir
Expertos del café de todo el mundo, hacen hipótesis de cuál puede ser la evolución del mercado del café este próximo 2021, y solo algunos indicadores como la llegada al mercado de ciertos cafés, o el crecimiento de determinadas tendencias sirven para proyectar lo que podría pasar este próximo año.
En este escenario, lo que pasa en Brasil, principal productor mundial de café, adquiere una importancia relevante para poder hacer una composición de la situación. “En estos momentos, explica el economista brasileño y director de Pharos Consulting Company, Haroldo Bonfá, el mercado ha empezado a llenarse de café procedente de la gran cosecha fresca de Brasil, que destaca esta temporada por su calidad particularmente buena, no solo en cata sino también en tamaño de grano. Esto ya se está notando en las operaciones del mercado, sobre todo teniendo en cuenta que la siguiente cosecha de este país será “off year”, lo que hace difícil pronosticar cuál será su tamaño y cómo influenciará el clima en su resultado”.
La situación provocada por la COVID-19, se han dejado notar en toda la cadena del café y su efecto en el campo, como primer eslabón de la cadena tiene, irremediablemente, consecuencias en el mercado.
“En la primera ola de la pandemia ya hemos visto como todos los países productores debían garantizar medidas de seguridad a todas las personas involucradas en las tareas del café”, explica Haroldo Bonfá. “En realidad estas medidas suponen un incremento pequeño en la partida de costos pero en cambio sí representan un impacto importante en la cosecha”, y es que, sin ir más lejos, las restricciones de movilidad han dificultado la llegada de cosechadores a las fincas y, por ende, el encarecimiento de la mano de obra disponible.
Sin embargo, y paradójicamente a la grave situación sanitaria que está viviendo Brasil, este país representa una de las pocas áreas cafetaleras que han sido capaces de mantener los empleos en el café y los ingresos regulares durante la pandemia. Y esto ha podido ser así, básicamente, porque la mecanización de la producción en este país es mucho mayor que en otros orígenes y en cambio, el número de pequeños y medianos productores, menor.
CADENA DE VALOR, COMPROMETIDA
El mercado del café se caracteriza por ser cíclico, y en las últimas décadas pocas veces exento de crisis como la actual. Ahora bien, lo que está claro es que esta nueva crisis difiere significativamente de las anteriores en el grado de afectación de la cadena. “Los productores de café siempre parecen enfrentarse a la adversidad, desde el clima hasta la política. En cambio, con la COVID-19, el impacto de la crisis se ha dejado notar de forma muy especial en las cafeterías que han tenido que cerrar y, aunque sea temporalmente, reorientar por completo su modelo de negocio”, apunta el escritor y periodista especializado en café, Jeff Koehler.
“El comercio electrónico y las alternativas de servicio fuera de los establecimientos están resultando fundamentales durante la pandemia para mantener a flote muchos negocios”, añade el director de Pharos Consulting Company. “Durante los últimos meses se ha producido una increíble aceleración del comercio de café a través de estas dos vías, e-commerce y servicios delivery, demostrando los operadores la efectividad de estos canales, con nuevas reglas de seguridad aplicadas”.
Los confinamientos, la limitación de la movilidad y las cafeterías cerradas han propiciado un nuevo tipo de conexión en línea, tostadores de café – cafeterías – consumidores. “Los tutoriales en Instagram sobre como preparar café en casa se han disparado”, explica Jeff Koehler.
El reto, dice, será ahora cómo llevar toda esta experiencia a las cafeterías una vez que puedan normalizar sus servicios. “Las limitaciones de aforo, las persianas bajadas y cada vez más personas trabajando a distancia, han incrementado la cantidad de café que se consume en casa y aunque la gente empezó a regresar a sus cafeterías favoritas después de los primeros meses más críticos de la pandemia, el consumo doméstico seguirá siendo significativamente más alto de lo que era antes de la pandemia y la demanda de café de calidad mantendrá un interés sostenido”, asegura Koehler quien acaba de publicar su último libro “Where the Wild Coffee Grows”, un recorrido por la historia no escrita del café de Etiopia.
NUEVAS TENDENCIAS EN LA PRODUCCIÓN DE CAFÉ Y NUEVOS CANALES DE DISTRIBUCIÓN DEL PRODUCTO
Además de este periodista y escritor, otros muchos expertos en café coinciden también en que el incremento en la demanda de café de especialidad dirigido al canal doméstico vivido estos meses, no solo perdurará en el tiempo sino que incluso crecerá. Y es que es fácil pensar, dicen, que una vez que las personas se dan cuenta de lo relativamente fácil que es preparar una taza realmente buena de café en casa, no querrán volver a beber, simplemente, “lo que sea”.
“Como me dijo una persona que es leyenda en la industria del café, la gente está abandonando sus hábitos y descubriendo sus preferencias”, apunta Jeff Koehler. “Beber un buen café, a menudo tiene que ver con la educación. Las personas necesitan entender por qué deberían comprar este o ese café, por qué deberían gastar más en sus granos, por qué es mejor utilizar café recién molido o molerlo ellos mismos, qué tipos de cafés diferentes se pueden preparar con diferentes equipos, desde la V60 hasta una Chemex pasando por una clásica olla Moka.
Todo es un proceso, pero cuando aprendemos y vemos que, por ejemplo, nos encanta el sabor afrutado de un café de Kenia, no volveremos tan fácilmente a beber cualquier café. Es más, hablando recientemente con Geoff Watts, de Intelligentisia Coffee, me dijo algo que creo que es muy acertado, Pedir café online o comprarlo en una tienda de café especializada te obliga a convertirte en un consumidor más activo de lo que eras cuando dejas la toma de decisiones a otros.
Tanto es así que, incluso el simple hecho de sostener un paquete de café en la mano y leer lo que está impreso en él, nos acerca un paso más a la finca y puede influir en nuestra comprensión de la procedencia y el valor de ese café. Realmente creo que reconsiderar el valor de una taza de café significa inevitablemente beberla con una visión más amplia y conectarse con el mundo del café en general, y en estos momentos, la gente está aprendiendo el valor real de su taza de café. Y si este mayor y profundo conocimiento del café apuntado por Koehler puede ser una buena estrategia para dinamizar el consumo, Bonfá añade la calidad, como vía para minimizar las crisis recurrentes de mercado en el sector del café. “No existe una fórmula mágica que nos garantice que el mercado del café no volverá a vivir una crisis, pero una forma de reducir las posibilidades pasa por ampliar perspectivas, diversificar variedades, ofrecer calidad diferenciada y asegurar experiencias únicas para cada necesidad del consumidor.
La participación de los gobiernos de los países productores es esencial en este objetivo, tanto para brindar apoyo financiero y tecnológico, como para el aprovisionamiento de nuevas variedades de semillas resistentes. La financiación de programas de formación y el acceso a Internet son pasos imprescindibles que se deben dar para garantizar a los productores, información instantánea y su inserción en el mercado global. Además, los caficultores necesitan ser más valorados en la cadena del café y esto solo se puede lograr con una garantía de precio mínimo o una mayor transparencia en el precio del producto en cada eslabón de la cadena.
Todo esto es clave para contribuir a minimizar las crisis del mercado del café en el futuro, las cuales, tengámoslo claro ya no llegarán a causa de pérdidas de cosecha provocadas por plagas en los cafetales, pues están surgiendo nuevas variedades de café más resistentes que junto con los avances en la investigación, por ejemplo, en el campo del hongo Roya, refuerzan la idea que este tipo de problemas se solucionaran en el futuro. En definitiva, pues, en mi opinión, la calidad es el atributo más importante para el precio del café, y el diferencial para que su cadena de valor obtenga los mejores beneficios y esquive las crisis recurrentes de estas últimas décadas”.
OFERTA, DEMANDA Y PRECIOS
La Organización Internacional del Café (OIC) ha advertido que el ciclo 2019-2020 se ha cerrado con un sobrante de 1.54 sacos de café en comparación con los 4.4 millones del período 2018-2019. Este excedente, combinado con el hecho de que la mayoría de la cosecha de Brasil de 2020/21, que será año de cosecha alta en el ciclo bienal de producción de Arábica, llegará al mercado en los próximos meses, la recuperación de precios se prevé complicada.
Y es que si bien, según la OIC a inicios de año, las compras de pánico y acopio de reservas aumentaron la demanda mundial de café por la pandemia, se calcula que durante los próximos meses el consumo se mantendría en retroceso debido a la afectación de la segunda ola de la COVID-19 y la presión de la recesión económica.
En comparación con al año anterior, la demanda en los cin- co principales países consumidores, que representan el 63,7% del consumo mundial, tuvo un descenso considerable en 2019/20. Se calcula que el consumo en la Unión Europea, después de dos años de fuerte crecimiento, fue de 45,04 millones de sacos, un 1,3% más bajo que el del año anterior. De igual forma, entre octubre de 2019 y agosto de 2020 las exportaciones mundiales de café descendieron un 5,6% en comparación con las de ese mismo periodo en el año cafetero 2018/19. En los once primeros meses del año cafetero 2019/20, las exportaciones de Robusta fueron las que menos cayeron, un 2,6%, a 44,61 millones de sacos, mientras que las exportaciones de Otros Suaves descendieron un 9,7%, a 23,42 millones de sacos, las de Suaves Colombianos un 6,8%, a 12,93 millones de sacos y las de Brasil y Otros Naturales un 6%, a 35,58 millones de sacos.
En este contexto, el mercado de futuros del café Arábica sigue siendo el más afectado y ha sido en el que se ha constatado un mayor especulación por parte de los inversores ante la caída del consumo en Estados Unidos y Europa, y las exportaciones de los países productores (la recogida de café ha sido uno de los mayores problemas de los caficultores, ya que si el grano no se recoge en su punto correcto, se madura, pierde sus pro- piedades y baja de valor).
Según Diego Morín de Investing, “la incertidumbre por el coronavirus ha lastrado las expectativas de los productores de materias agrícolas, las cuales han sufrido una volatilidad en los últimos meses por el miedo a perder la cosecha debido a las medidas de confinamiento”.
EN LOS PAÍSES PRODUCTORES
Una salida para el café sobrante podría ser la promoción del consume interno en los países productores. Para el presidente de la Asociación Cafetalera de El Salvador (Acafesal), Omar Flores, “ante la crisis económica, es el momento de incentivar el consumo interno para superar el 35% de café importado que se inyecta al mercado salvadoreño. “Hay una gran oportunidad de vender, lo que necesitamos son estrategias y una forma de que llegue al consumidor para que vaya cambiando a la producción nacional”.
En este caso, uno de los modelos ha seguir, sería el de Brasil, que tras un programa de 15 años de incentivación del consumo nacional ha situado la demanda interna de café en alrededor de 6kg/persona/año, con un incremento medio de un 3%, anual. Estas cifras multiplican de forma considerable el consumo de café de otros países productores, como Colombia, 2,1kg/persona/año, Vietnam, 1,6 kg/persona/año o Etiopía, 2 kg/persona/año. En la base del éxito de la estrategia brasileña, el haber compartido con los consumidores los beneficios que tiene el café para su salud, además de dar apoyo institucional a las empresas de café y haber conseguido una mayor estabilidad financiera para los productores al haber facilitado su acceso tanto a los mercados nacionales como internacionales.
*Puedes acceder a la revista Fórum Café nº84 completa aquí.