Grounds for Health es una organización internacional sin ánimo de lucro que trabaja para eliminar el cáncer de cuello uterino en las regiones cafetaleras de todo el mundo.
Allí, las mujeres son una parte muy importante de la mano de obra encargada de la producción de café. Más del 70% del trabajo, incluida la cosecha y también las tareas de clasificación, dependen de estas trabajadoras. Sin embargo, en la mayoría de los casos, su salud no es una prioridad.
Grounds for Health fue fundada en 1996 por un reconocido ejecutivo cafetero y un médico obstetra/ginecólogo tras comprobar durante una visita conjunta a varias cooperativas de café en México que las tasas de cáncer de cuello uterino en estas comunidades eran una de las más altas del mundo. De hecho, más del 90% de las muertes por este cáncer se localizan en países en desarrollo, en los que se concentra, además, más del 90% de la producción mundial de café. En estos territorios, son habituales los entornos de bajos recursos económicos y la falta de hábitos médicos relacionados con la prevención de enfermedades. Es así, que los dos amigos, sabiendo muy bien que el cáncer de cuello uterino se puede prevenir por completo mediante la detección y el tratamiento temprano, decidieron ponerse manos a la obra y fundaron Grounds for Health.
“En el eje central de la estrategia para conseguir nuestros objetivos está la formación específica de médicos y enfermeras locales en la detección precoz y tratamiento de este cáncer, así como el desarrollo de programas de ayuda para la implantación de planes integrales y sostenibles en sus comunidades que permitan asegurar una buena salud para las mujeres y reducir, así, el riesgo de que estas puedan morir de cáncer de cuello uterino.
Para llevar a cabo estas tareas, recurrimos a métodos que nos permitan un gran impacto y que a la vez resulten asequibles para optimizar al máximo los recursos. Es así, por ejemplo, que actualmente las pruebas de detección las estamos realizando a través de la IVAA, un método de bajo costo que utiliza vinagre blanco para revelar cambios celulares tempranos en el cuello uterino y que podrían convertirse en cáncer. El tratamiento se logra mediante dispositivos que eliminan las células precancerosas mediante congelación o calentamiento.
La gran complejidad de todo este programa es que la evaluación debe ir seguida de tratamiento inmediato, idealmente el mismo día, ya que es posible que las mujeres no puedan regresar para recibirlo después debido a sus numerosas responsabilidades laborales y familiares.
Estos enfoques de detección y tratamiento son reconocidos por la Organización Mundial de la Salud como rentables y apropiados para los entornos de recursos más bajos, como las comunidades donde se cultiva el café. Sin embargo, muy pocos países en desarrollo han logrado ampliar sus programas de manera eficaz. Es por esta razón que muchas organizaciones están comenzando a introducir nuevas tecnologías en la detección y el tratamiento, y es en este sentido que Grounds for Health somos reconocidos como abanderados en innovación en la prevención del cáncer de cuello uterino en las comunidades remotas. En los últimos meses, por ejemplo, hemos empezado a introducir la autoprueba del VPH, una tecnología de detección totalmente nueva para entornos como las comunidades cafeteras de economías más comprometidas.
El objetivo es que las mu- jeres puedan continuar realizándose pruebas de detección durante un momento en que los recursos médicos y la atención se han centrado en la lucha contra la COVID-19. Este nuevo enfoque nos permite seguir con nuestro trabajo durante la pandemia, a la vez que preparamos el escenario para una mayor precisión, eficiencia y satisfacción de la paciente durante el proceso de detección, una vez superada la situación provocada por la COVID-19.
Desde nuestra fundación, hemos desarrollado programas en México, Nicaragua, Perú y Tanzania. También hemos brindado asistencia técnica a corto plazo mediante capacitación y prestación de servicios en Guatemala y Kiribati, un archipiélago y país insular ubicado en la zona central oeste del océano Pacífico, al noreste de Australia. Nuestros programas actuales se encuentran en las regiones de Oromia, Sidama y la Región de los Pueblos del Sur (SNNP), en Etiopía y en el condado de Nyeri, en Kenia.
En total hemos examinado cerca de 123.000 mujeres y hemos tratado a más de 10.000 por pre cáncer de cuello uterino. Hemos capacitado a 550 proveedores clíni- cos y a miles de promotores de salud comunitarios que se encargan de mantener los programas de detección en marcha. Y es que durante estos años hemos aprendido que el éxito del programa está fuertemente ligado a la participación de la comunidad. Es ella, la propia comunidad, la que tiene el poder de eliminar las barreras que impiden que las mujeres reciban la atención que necesitan.
Es así que nuestro trabajo incluye la creación de alianzas con autoridades de salud nacionales y regionales, ONGs, hospitales, así como cooperativas y fincas cafetaleras y líderes comunales que nos ayuden a que las mujeres, pero también el resto de los miembros de las comunidades, hagan suyo el programa de prevención y sean conscientes de su importancia. Por todo ello, resulta determinante prestar atención a los matices de cada comunidad de forma personalizada, respetando la influencia de todas las personas involucradas.
Para el trabajo movilizamos y formamos promotores de salud locales. Estos movilizadores comunitarios brindan educación; reclutan mujeres para los servicios; rastrean a quienes necesitan atención continua y ayudan a reducir el estigma y la desinformación dentro de sus territorios.
Siempre que es posible, las cooperativas de café locales, que comparten nuestro compromiso de mantener a las mujeres sanas, nos ayudan a llegar a las familias e involucrar a los líderes comunitarios en la lucha contra el cáncer de cuello uterino. Según sus posibilidades, estas organizaciones contribuyen con el programa de múltiples formas, dando ayuda al reclutamiento de pacientes; ofreciendo apoyo financiero; o facilitando el transporte a las mujeres a las campañas de detección y tratamiento, entre otras iniciativas, todas buenas e igual de importantes.
Como ONG relativamente pequeña que es Grounds for Health, somos lo suficientemente ágiles como para evaluar continuamente la calidad y el impacto de nuestros programas y ello nos permite ir avanzando en la consecución de nuestros objetivos. Es así, que hemos hecho de la innovación una de nuestras banderas, introduciendo de forma continuada mejoras en las tecnologías y enfoques de la atención personalizada. Esto nos permite seguir aumentando nuestro impacto y seguir avanzando en nuestra batalla contra el cáncer del cuello uterino en mujeres de las comunidades cafeteras más desfavorecidas de todo el mundo”.
Ellen Starr
WHNP y Directora Ejecutiva de Grounds for Health
*Puedes acceder a la revista Fórum Café nº83 completa aquí.