Perú se ha convertido en los últimos años en un origen de referencia para el café de especialidad. Más de una cuarta parte de la producción nacional se dirige ya a este segmento de mercado y compradores internacionales de todo el mundo se interesan por el café peruano.

En la Taza de la Excelencia de este año, el café ganador, un 50% Geisha lavado / 50% SL-09 de la región de Cusco obtuvo 90 puntos y otros 23 lotes superaron los 87, dando muestra de la alta calidad de cafés que se producen hoy día en el país.

Desde hace dos décadas, muchos caficultores peruanos decidieron apostar por el cultivo y procesamiento de cafés especiales para hacer frente a los bajos precios del café convencional. La alta calidad y la diversidad de los cafés especiales les permite hoy, obtener mejores réditos de su producto y les ha abierto las puertas a un nuevo mercado con mejores oportunidades.

Las excelentes condiciones de las tierras peruanas para producir cafés de la máxima calidad han contribuido enormemente al objetivo de los caficultores, el cual, sin embargo, no se hubiera podido alcanzar sin el reconocimiento internacional al “nuevo” café peruano. Este llegó plenamente hace tres años, cuando tras el esfuerzo conjunto de diversas organizaciones para lograr llevar la Taza de la Excelencia a Perú a lo largo de 14 años, consiguieron incluir al país en el programa de este importante certamen de calidad, que premia y actúa como escaparate internacional para los mejores cafés de los 13 países donde se celebra.

TAZA DE LA EXCELENCIA EN PERÚ

En 2017, se realizó la primera edición de la Taza de Excelencia en Perú, y los impactos conseguidos desde entonces no dejan de repercutir positivamente en el sector del café de este país. Las ventas de cafés especiales a terceros países han pasado de 7 a 45 millones de dólares en el periodo 2016- 2019, según Aduanas. 

Estos cafés aún no superan el 5% del volumen total exportado, según estimaciones de la Central de Café & Cacao, lo que significa que hay oportunidades de crecimiento en esta oferta. Saber del reconocimiento internacional, también ha promovido el incremento del consumo interno de cafés de calidad, impulsando la aparición de al menos 300 cafeterías de especialidad y de más de 100 empresas tostadoras de cafés especiales que están generando marcas con cafés de esta categoría, 100% peruanos. Otro aspecto positivo y muy destacable es la mejora de la calidad de vida de los productores ganadores de Taza de Excelencia y la motivación para profesionalizar su trabajo. Un ejemplo de ello es Dwight Aguilar, quien en los últimos años se ha valido el reconocimiento como uno de los mejores productores de café del Perú.

La finca de Dwight, “Nueva Alianza”, está ubicada a más de 1.800 m.s.n.m., en el distrito de Santa Teresa, en la ruta hacia la ciudadela inca de Machu Picchu, en Cusco. Allí, rodeado de montañas, con un terreno enriquecido con aguas termales, y abundante flora y fauna silvestre cultiva su premiado café de la variedad Geisha.

En 2018, Dwight Aguilar obtuvo el primer puesto de la Taza de la Excelencia. Al año siguiente, logró estar en el top 10 de los mejores cafés. En las dos ocasiones, además, sus cafés han participado en las subastas internacionales de la Taza de Excelencia y los ingresos obtenidos le han permitido invertir en mejorar la infraestructura de su finca y adquirir equipos para procesar mejor su café. “Llevo 20 años dedicándome a la caficultura y antes de la Taza de la Excelencia, esta actividad no era rentable debido a los bajos precios del café. Lo que ganaba, apenas llegaba para alimentar a mi familia”, explica. Hoy, el 50% de su producción va al mercado internacional y el 50% restante es absorbido por empresas tostadoras nacionales y por Dwight Coffee, su propia marca de café. Además, obtiene ingresos capacitando a otros caficultores que buscan seguir sus pasos.

NUEVAS TENDENCIAS DE CONSUMO

El café ganador de Dwight en 2018 fue comprado por Maruyama Coffee, una compañía japonesa especializada en la búsqueda y compra de cafés especiales desde 1991. Cuentan con 12 cafeterías de especialidad en Japón y comercializan café a través de su web. Antes de que la Taza de Excelencia tuviera su certamen en Perú, Kentaro Maruyama, presidente de Maruyama Coffee, no estaba interesado particularmente en el café peruano porque la información sobre su calidad y trazabilidad, explica, era escasa.

Ahora, sin embargo, Perú es uno de sus referentes para comprar café de la mayor calidad. “Cuando empecé en la industria, se sabía poco sobre los cafés del Perú, no tenías información transparente sobre las fincas, los productores y los orígenes. Después de que se empezaran a convocar los concursos de la Taza de Excelencia en el país, los compradores en Asia supimos sobre los productores, dónde están localizadas sus fincas y ahora podemos establecer relaciones comerciales directamente con ellos”, refiere Maruyama. En 2019, volvió a repetir la experiencia y compró un lote del café de Grimanés Morales Lizana, de la región Cajamarca, que aquel año obtuvo el primer lugar del certamen.


Hilda Leguía, ganadora de la Taza de la Excelencia Perú 2020
“Como tostador puedo decir que el café peruano permite ser utilizado de diversas formas y funciona bien tanto en tuestes ligeros como en blends. Son cafés dulces, suaves, limpios y con buena acidez, pero sin que esta sea muy marcada”, afirma Maruyama.

El café ganador de Grimanés también fue adquirido por Harrods, el icónico centro comercial de Londres fundado en 1849 y que desde hace cuatro años ofrece cafés especiales del mundo. “Era un Costa Rica 95, una variedad nueva en Perú, con notas a melocotón y papaya”, explica Bartosz Ciepaj, maestro tostador en Harrods. Los compradores de café en Harrods proceden de países asiáticos y árabes que están a la caza de nuevas variedades y experiencias, tal cual como sucede con el vino. “Ahora el consumidor pregunta, por ejemplo, por un Bourbon igual como si buscara un Chardonnay”, indica Ciepaj. Esta tendencia, añade, se está acentuando en la pandemia, pues las personas han aumentado su consumo de café en casa, con un especial interés en beber cafés de calidad.

Pero la gloria no solo está destinada a los primeros lugares de la Taza de la Excelencia. En realidad, ingresan a la subasta internacional todos los cafés que obtienen más de 87 puntos en un proceso de cata. En 2019, Perú tuvo 21 cafés clasificados en la subasta.

CAFÉ CON CARÁCTER PERUANO

Supremo Coffee, un tostador especializado en el comercio directo con productores de microlotes, con sede en Alemania, compró, por ejemplo, el Bourbon de Amancio Zúñiga Aquino, producido en la región Huánuco y que alcanzó el puesto 14 en Taza de la Excelencia 2019.

“Los cafés del top 20 de esta competición en cualquier país son todos muy buenos, por eso, más que en los puntajes, nos enfocamos en encontrar el café que se adecue a nuestros clientes y el que compramos el año pasado en Perú realmente nos sorprendió y cambió mi punto de vista sobre el café peruano”, señala Rafael Braune, co-fundador de Supremo Coffee. Tenía notas a frutas tropicales. “Cuando elegimos un café buscamos que este sea un embajador de su país en Alemania y eso significa que tiene que demostrar lo mejor de los sabores del país del que procede porque hará que los consumidores se interesen cada vez más por ese origen”, explica.

En relación precisamente a esta identidad del café peruano, Michael Sheridan, director de compras de Intelligentsia Coffee, una de las empresas más influyentes en el segmento de los cafés especiales, y con larga experiencia en la compra de cafés de este origen apunta, “lo que buscamos en Taza de la Excelencia es encontrar el café que tenga las notas sensoriales con las que identificamos al Perú para poder comunicar ese origen a nuestros consumidores. El prototipo de café peruano debe comunicar sabores y experiencias tal y como lo hace la cocina peruana hoy en día”. Y ello, asegura, va más allá del trabajo del productor.

PERÚ MARKETPLACE Y AMAZON

Al respecto, Mario Eduardo Ocharan Casabona, Director de Promoción de las Exportaciones de PromPerú, explica que se está llevando a la digitalización de la trazabilidad del café para garantizar a los compradores internacionales las calidades, certificaciones y puntajes de los cafés que se exportan. Además, añade, se ha empezado ya a desarrollar el programa de la huella ambiental del café peruano para medir sus impactos en el medio ambiente e identificar oportunidades de mejoras y mitigación de procesos.

El programa se ha iniciado con 30 exportadores, de un total de 140, y el objetivo es que al 2021 todos formen parte de él. Además, se impulsará que las empresas cafetaleras tengan presencia en las plataformas de e-commerce más conocidas a nivel global como Amazon, JD.com y Mercado Libre. También se acaba de lanzar Perú Marketplace, una tienda virtual a costo cero y de acceso gratuito para exportadores. Actualmente cuenta con 31 empresas que podrán ofrecer sus cafés por este nuevo canal de promoción digital y se espera que a fines del 2021 sean más de 100.

Además, con intención de cumplir con la demanda de una industria cada vez más interesada por el café peruano, la innovación y la capacitación se suman a los objetivos más inmediatos del café de especialidad de este origen.

“Se requiere darle consistencia a la calidad y tener más perfiles de café, especialmente en regiones poco exploradas como Amazonas o San Martín, para lograr una oferta más diversificada para la exportación de cafés especiales”, señala Geni Fundes, Gerente General de la Central Café & Cacao y Coordinador General de Taza de la Excelencia Perú 2020. Estos aspectos implican que se trabaje en un programa de mejoramiento genético de variedades tradicionales, que se cultivan en Perú hace más de 100 años, para darles resistencia a plagas y potenciar su calidad. Además, se necesita implementar un programa de financiamiento del Estado para que los productores puedan instalar hectáreas de cafés especiales en sus fincas, ya que debido a la plaga de la roya del año 2013 muchos sembraron variedades mejoradas que les permitieron recuperar volumen, pero no les garantizan calidad. Estos cambios ayudarán a atender una mayor demanda proveniente de mercados emergentes como Japón, Corea del Sur, China y Australia.

La Taza de la Excelencia ha resultado, sin duda, un antes y un después en la caficultura peruana. El reconocimiento y los altos precios que reciben los productores por sus cafés en la subasta de este certamen, concluye Fundes, “es para ellos un estímulo personal para seguir adelante en la apuesta para mejorar la calidad de su café que está logrando, además, un efecto multiplicador y revolucionario en la caficultura peruana”

Norka Peralta Liñán y Pamela Acosta Rodríguez – Cafelab.pe

*Puedes acceder a la revista Fórum Café nº83 completa aquí.